Comenzó la campaña de abonos del Depor, toda una tradición en la ciudad herculina y principal manera de compromiso de cada aficionado con su club. En las últimas semanas, hubo personas que, con todo el derecho del mundo, expresaron en las redes sociales su disgusto y su intención de no renovar. Pero me da la sensación de que la entidad blanquiazul va a volver a contar con un importante apoyo de sus seguidores.
Y es que ya está sobradamente demostrado que da igual la categoría en la que esté el equipo. La afición es fiel y constante. Nunca pierde la esperanza de vivir tiempos mejores. Siempre le ilusiona viajar para ver a los suyos o las reuniones con los miembros de su peña. Y ese sentimiento es demasiado fuerte como para que se pierda de la noche a la mañana.
El éxito de la campaña de abonos sería el primer paso hacia un nuevo intento de ascenso. Otra parte del camino la tiene que hacer la plantilla. Pero los jugadores ya saben que siempre tendrán a su lado a un buen grupo de jóvenes y no tan jóvenes.