Hoy los seguidores del Deportivo volverán a ver a su equipo vestido de corto tras no tener partido el pasado fin de semana debido a la expulsión del Extremadura del campeonato liguero.
Lo más positivo, además de sumar tres nuevos puntos y evitar un largo desplazamiento, ha sido el descanso que ha disfrutado la plantilla para afrontar esta tarde con más fuerzas el inicio del tramo decisivo de la actual temporada.
A los de Borja Jiménez le quedan cinco duelos –si alcanzan la final del playoff de ascenso– para acabar el curso. Ello hace que sean cuatrocientos cincuenta minutos (sin contar posibles prórrogas) los que restan para dar el salto al fútbol profesional o seguir en la Primera RFEF.
La tarea a la que se enfrenta la escuadra blanquiazul tendrá un aliado añadido, su afición, al ser cuatro duelos en Riazor. Ello debe aprovecharse para lograr un objetivo que se ha complicado más de lo deseado. Pero, como ha sido una constante en la centenaria entidad, los éxitos obtenidos siempre han llegado con sufrimiento y heroicidad, y éste no iba a ser diferente.
