El Barcelona y los árbitros
lll
17º-23º

El Barcelona y los árbitros


Usuario

Crece y crece el escándalo de los árbitros y el Barcelona. No parece tener fin. Cada día aparece una arista nueva que engrandece un caso que ha tomado proporciones gigantescas, aunque todo el mundo lo  sospechaba al salir a la luz pública por primera vez. Y eso, a pesar de que toda la prensa catalana (la deportiva y la de información general) ha tratado de taparlo hasta que la magnitud del asunto no se pudo ocultar, en esta época de la comunicación y de las redes sociales.


Decía Xavi el otro día que le había apenado que San Mamés hubiera sido muy hostil con el Barcelona. Pero no deja de ser lógico. Aquella solidaridad interregional para otras cosas deja de serlo cuando afecta directamente a los intereses de uno. Y, además, que el gran público tiene claras dos o tres cuestiones, y una de ellas es que el equipo azulgrana –como institución- trató de cambiar de forma irregular el normal discurrir de la Primera División a lo largo de muchos años.


Parece obvio que no se compraban partidos directamente sino que se compraban voluntades. Había gente que se dejaba ‘aconsejar’ para medrar en el mundo del arbitraje. Y eso durante más de veinte años. Ahora quieren hacernos ver que nadie sabía nada de eso, pero lo más probable –y se sabrá en el futuro- es que casi todos lo supieran y se callaron por sus propios intereses.


Laporta, en su papel, habla de honor y de ataques al Barcelona ahora que está líder de la clasificación. Pero no le interesa hablar de que este tiempo señalado también le salpica a él porque también abarca su primera etapa al frente del equipo azulgrana. Y, por lo tanto, está obligado a ofrecer explicaciones claras para mayor tranquilidad de sus socios y de los que no lo son.


Tardó mucho el Real Madrid en ponerse en contra del Barcelona en este asunto. Pero, a pesar de razones deportivas que todos comprendemos, estaba obligado a hacerlo. El máximo rival tiene que aprovechar una situación como ésta y, si puede, colaborar en su hundimiento. Pero no todo es tan sencillo porque está metida por medio la Federación Española de Fútbol y otros elementos que no juegan en la competición pero que intervienen con su poderosa influencia. Por si fuera poco, la política también mete baza con la intervención de la Fiscalía General del Estado, lo cual garantiza la eternidad de este proceso al que se le augura larga vida y pobres conclusiones.

El Barcelona y los árbitros

Te puede interesar