Hablaba el otro día con un exfutbolista y conveníamos en que en muchas ocasiones es mejor ir de abajo a arriba. Hemos visto en otras temporadas casos en los que muchos de los equipos que estaban en la parte alta de la tabla, entre ellos el Depor y en no pocas ocasiones, se desinflaban de manera clara para llegar al final del curso sin cumplir con los objetivos marcados.

En el polo opuesto, hemos asistido a ascensos de escuadras que venían trabajando de forma seria durante todo el curso, creciendo como equipo, escalando posiciones, para llegar al momento de la verdad con fuerza y solvencia.

El ejemplo claro lo tenemos en el Racing de Ferrol en el pasado curso o en el de Santander hace dos temporadas.

Alcanzar el liderato, si el Celta mantiene la proyección de puntos, pasa por hacer una segunda vuelta de record, pero mientras sea posible hay que intentarlo. Este mes será clave para ver si los de Idiakez son capaces de semejante proeza y de seguir subiendo peldaños.