Jairo Arias, entrenador del Montañeros, pasa revista del momento de su equipo. Un ascenso, dos títulos y casi once meses después, la lista de retos aún no tiene todos sus ítems tachados, pues mañana disputarán ante el Galicia Mugardos las semifinales de la Copa Diputación de A Coruña, el último trofeo de una temporada que va a terminar con la planificación de la próxima casi finiquitada. El mes de julio sí será de descanso para plantilla y cuerpo técnico, pero ya que han llegado hasta aquí, esperan no marcharse de vacaciones sin antes firmar el triplete el próximo domingo.
Al ser cuestionado por cómo está la plantilla, el técnico asturiano da valor a estos trofeos, pero reconoce que la campaña se está haciendo larga. “No digo que no me guste este formato de copas, que está bien, pero creo que en el fútbol amateur no puedes estar jugando hasta el 29 de junio, que es el día en que terminarán los que lleguen a la final. Nosotros empezamos la pretemporada el 29 de julio”, recuerda Jairo, que es consciente de que otros equipos lo pueden llevar incluso peor.
“Para equipos que no han conseguido el premio de ascender se les puede hacer más larga aún. Por ejemplo el Mugardos tuvo la mala fortuna de descender, jugó antes la final de la Copa de Ferrol y sabe que el míster y muchos jugadores no siguen. Pero ahí están, se van a presentar y van a competir. Para mí tienen mucho mérito”, enfatiza.
El entrenador considera que se le pudo dar algo más de brío a este final de curso. “Tal y como fue la final de la Copa de A Coruña, se podía haber jugado la semifinal el domingo pasado y la final el miércoles o jueves de esta”, apunta.
Más allá de eso, el interés del equipo en la competición es total, pues nadie se ha bajado del barco. “No hemos hablado con todos, pero sí casi, e incluso algunos que saben que no van a continuar siguen entrenando. Siguen viniendo todos. Por esa parte, chapó”.
Para la Copa Diputación, que se celebrará mañana y el próximo domingo en el campo de A Marola (Dexo, Oleiros) y que tiene en el Negreira-Dumbría la otra semifinal masculina, tirarán de la plantilla que logró los éxitos esta temporada. Aunque quisieran, no podrían contar con los fichajes que ya han ido haciendo, algo que Jairo ejemplifica a través de la figura de Iago López: “Los jugadores tienen una licencia federativa hasta el 30 de junio, en su caso con el Betanzos. Por lo que no es que no pueda jugar, es que tampoco puede entrenar con nosotros todavía”.
Uno de los retos que tiene como entrenador al ver como se alarga la temporada es el de mantener la forma del equipo. Lo busca con unas sesiones que nada tienen que ver con las de la pretemporada o un mes cualquiera de curso.
“Hay muchísima diferencia. En pretemporada son entrenamientos muy enfocados a trabajos condicionales y prácticos, sin un objetivo de tener que sumar tres puntos. Es decir, solo nos enfocamos en el modelo de juego propio. Sí que es cierto que, como no tenemos un rival al que ganar, vamos metiendo estructuras —como digo yo— para el día de mañana, tenerlas almacenadas en la mochila”, inicia la comparación entre etapas.
“Quieres que no pierdan ritmo, pero que tampoco se vuelvan locos a nivel mental”
"Durante la competición son entrenamientos de modelo de juego propio, pero también enfocados al rival al que nos vamos a enfrentar: por dónde le podemos hacer daño, cómo podemos someter a este rival en función de la estructura que ellos manifiestan, qué comportamientos tienen… Y también, lógicamente, en momentos sin balón: cómo reducir su tiempo de posesión para que no nos hagan daño, qué comportamientos manifiestan. Eso no cambió nada durante la temporada liguera, los entrenos fueron exactamente iguales”, continúa el preparador.
No hubo variaciones ahí, pero sí ahora. “Sería un castigo para ellos mantener la exigencia de toda la competición. Quieres que no pierdan ritmo competitivo, pero que tampoco se vuelvan locos a nivel mental”, explica.
¿Y cómo consigue eso? “Respetamos un poco más los espacios de cada día. El miércoles hicimos unas ligas en espacios reducidos, ayer —por el jueves— otros partidillos en espacios más amplios... No son pachangas, ni mucho menos, pero ya es de otra manera”, ejemplifica el de Avilés con las últimas sesiones.
En caso de lograr el título, Arias no confirma que vayan a jugar la Supercopa Galicia, torneo que enfrenta a los ganadores de las Diputaciones: “Sería algo que el club tendría que valorar, poniendo en una balanza el prisma del entrenador, el económico, etc. Desde el mío, es hipotecar un poco la pretemporada y más estando en Tercera, porque son ‘amistosos’ contra equipos de Preferente o Primera Futgal e igual tienes que enfocarte en otras cosas”.
Jairo está contento con la forma en que se ha desarrollado la planificación hasta ahora. “Le pongo una nota muy alta, porque hemos firmado primeras opciones y la gente ha querido venir pese a tener propuestas de la misma categoría y con más dinero. Les ha gustado mucho el proyecto, la idea de juego, lo que se viene haciendo en el Montañeros...”.
“No nos podemos comparar con clubes que ingresan por taquilla o por tener un bar”
En este sentido, puntualiza que lo han logrado así y no a golpe de talonario. “Tenemos un presupuesto humilde y casuísticas como que no podemos firmar jugadores que no sean de A Coruña porque no podemos pagar desplazamientos o vivienda. El otro día leía al entrenador del Arteixo diciendo que nuestra inversión iba a ser muy importante y para nada. Muchas veces el desconocimiento te hace decir algo fuera de lugar y para mí eso lo es, porque nuestro presupuesto es humilde”, asegura.
“Nuestra situación es parecida a la del Silva, sin cobrar entradas y sin un bar. No podemos compararnos con clubes que ingresan por taquilla o por el ‘bochinche’”, añade.
Por último, explica la situación de los juveniles. “Suben Óscar y Diego, definitivamente. Y luego está Enjamio, que lo vamos a renovar, hará la pretemporada con nosotros y lo más normal es que después salga cedido para rodarse en Preferente. Entrenará con nosotros dos días a la semana para mantener el vínculo, pero preferimos que tenga un alto minutaje”, argumenta.