Irene Ferreras manifestó desde su primera rueda de prensa como entrenadora del Deportivo Abanca, allá por el mes de julio de 2022, su deseo de construir un equipo protagonista con balón que, sin embargo, se pudiese adaptar a diferentes contextos de partidos y rivales a lo largo del curso en Primera Federación Femenina.
A lo largo de la presente campaña, la entrenadora madrileña se ha apoyado en varias estructuras tácticas para conseguir este objetivo siendo el 1-4-2-3-1 quizá el sistema más utilizado sobre todo en los encuentros disputados como local en Abegondo.
No obstante, el Depor ha usado tres esquemas tácticos diferentes en los planteamientos iniciales de los últimos tres partidos de liga. En la jornada 18, frente al Athletic Club B en Abegondo (2-1), el equipo coruñés utilizó el habitual 1-4-2-3-1; una semana más tarde, en Eibar (1-0), usó un 1-3-4-1-2, y el último fin de semana, en Lleida ante el AEM (1-0), formó con un 1-4-4-2 con ciertas similitudes al sistema presentado ante el Athletic B.
Sistema habitual
El 1-4-2-3-1 utilizado ante el filial bilbaíno, y en muchas fases de la temporada, contó con la presencia en la mediapunta de Eva Dios, la jugadora con un perfil más adecuado para esa demarcación, según afirmó Irene Ferreras en una entrevista a este diario el pasado enero.
La futbolista de A Illa ejerció de enlace entre el doble pivote habitual (Paula-Henar) y el ataque formado por Ainhoa y Charles en las bandas y Millene en la punta.
En la parcela defensiva, la portera Lucía estuvo escoltada por Cris, Inés y Raquel, titulares indiscutibles durante toda la temporada, y Monteagudo, la canterana que se ha ganado un hueco como lateral zurda.
Tres centrales en Eibar
El cambio más drástico del Depor Abanca en el aspecto táctico en las últimas semanas se produjo en la visita al Eibar, rival directo por el ascenso, con la elección de un 1-3-4-1-2 que fácilmente se convertía en un 1-5-2-1-2 dependiendo de la altura de las carrileras.
El equipo coruñés presentó una alineación con tres centrales (Inés, Lorena Reina y Raquel), dos carrileras (Cris y Charle), dos pivotes (Paula y Henar), una mediapunta (Laura Fernández) y dos delanteras (Ainhoa Marín y Carlota Suárez), además de la continuidad de Lucía en portería.
Irene Ferreras explicó en rueda de prensa, después de la derrota en Eibar, que su intención con el 1-3-4-1-2 era, por una parte, contrarrestar el juego directo del rival y tener mayor control en salida de balón debido a la presencia de las tres centrales y, por otro lado, contar con una amenaza mayor en ataque con la participación de dos delanteras.
Matiz en la delantera
En el último partido del Depor antes del parón, que también acabó con derrota por la mínima, esta vez en Lleida ante el AEM (1-0), Irene Ferreras recuperó una estructura similar a la habitual aunque con un matiz en la parcela atacante.
La madrileña utilizó un 1-4-4-2 con Millene Cabral y Laura Fernández como pareja de ataque. La principal diferencia entre el 1-4-2-3-1 que comenzó ante el Athletic B y el sistema utilizado en Lleida fue la presencia de Laura, más amenazante al espacio, por Eva Dios, que suele acercarse más a zonas de creación.
No obstante, Laura y Millene lanzaron apoyos en corto que permitieron al Depor jugar por momentos con un rol similar al de una mediapunta.
El resto del once lo formaron Lucía en portería; Cris, Inés, Raquel y Monteagudo en defensa, y Ainhoa, Letti, Henar y Charle en el centro del campo.
