El sábado, día 17 de junio de 2023, Galicia se proclamó campeona de la Copa de Regiones de la UEFA, el torneo más prestigioso de entre aquellos que disputan los futbolistas aficionados. Estaba previsto que el campeón de este certamen se conociera en el año 2021, pero la pandemia aplazó la segunda parte del mismo. Para un equipo español, el trayecto hasta el título es muy largo, lo que añade mérito a la Irmandiña.
Todo empezó en diciembre de 2019. La selección, encuadrada en el grupo F junto a Castilla-La Mancha y Ceuta, debía ser primera. En esa ronda inicial había seis grupos y serían solamente seis los combinados que avanzarían. Lo logró el conjunto dirigido por Iván Cancela, con un 0-2 ante los manchegos y un 4-0 frente a los ceutíes. Comenzaba a hacerse fuerte en casa, ya que esos partidos se disputaron en Sanxenxo y en la Illa de Arousa, respectivamente.
Llegó luego el momento de depender de la suerte. Dos de las seis selecciones lograron en un sorteo acceder directamente a las semifinales (Extremadura y Andalucía), mientras que las otras cuatro debieron afrontar una fase intermedia. Así, en febrero de 2020, cuando el Covid-19 empezaba a ganar terreno en las noticias, el cuadro gallego superó por 2-3 al País Vasco en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.
El 14 de marzo de 2020 llegó el estado de alarma, que implicó un confinamiento para toda la población española por el Covid-19. Fue un sábado, y durante esa semana Galicia estuvo en Las Rozas intentando (y consiguiendo) ser la mejor región española. Un 4-1 a las Islas Baleares y un 2-0 a Andalucía daba ese honor y la posibilidad de jugar la fase europea. Debería haberse disputado la siguiente temporada, pero tendría que esperar.
Retomó su camino
No volvería a jugar el conjunto gallego hasta octubre de 2022, momento en el que se resolvía el grupo 7 de la penúltima fase. Treinta y dos regiones en liza; ocho (una en cada grupo) avanzarían a la fase final. La Irmandiña, que jugó de nuevo en casa, cosechó dos victorias ante Ljubljana (3-0) y Ginebra (2-1); y un empate contra Pest (1-1). Los siete puntos sirvieron para avanzar.
Durante la fase final, disputada estos días, la Selección Gallega firmó un inmaculado camino (2-0 ante Irlanda, 2-1 frente a Zenica-Doboj, 0-1 contra Baviera y 3-1 ante Belgrado). Y así, casi cuatro años después, jugando fases sin margen de error, en las que una derrota habría sido definitiva; Galicia alzó el trofeo de campeón de Europa.
