Bergantiños 0-1 Rayo Cantabria
Nueva derrota del Bergantiños y van tres en las cuatro últimas jornadas: Palencia Cristo (2-1), Valladolid Promesas (0-1) y, hoy, Rayo Cantabria (0-1). El solitario gol de Jeremy en el minuto 65 fue suficiente para provocar un nuevo pinchazo del equipo de José Luis Lemos, que lo intentó de todas las formas posibles acosando a Germán en el tramo final pero sin el premio de lo más codiciado en el fútbol.
Lemos apostó por el 1-4-2-3-1 habitual con Palomares y Sellés en los laterales, Quindimil y Tomé como pareja de centrales; Uzal y Remeseiro en el doble pivote, Adri en la mediapunta, Pacheco y Pedrosa por fuera y Carlos López como referencia ofensiva. Las dos mejores ocasiones del cuadro carballés en la primera mitad tuvieron a Pedrosa como protagonista: primero con un cabezazo en boca de gol a centro de Palomares desde la derecha -su remate salió muy centrado- y después habilitando a Pacheco en la derecha con un gran pase, pero el 21 del Bergan, tras recortar y meterse en el área, se encontró con un defensa, que evitó su disparo.
La segunda mitad empezó con dos avisos muy serios del filial del Racing de Santander. Primero con una falta directa desde la frontal del área que obligó a esforzarse a Santi Canedo para evitra el 0-1 y después con un remate de Dani González al larguero cuando el conjunto visitante ya celebraba el gol.
El 0-1 llegó en el minuto 65. La jugada se inició con una buena diagonal desde el centro del campo para Dalisson, que se encontraba en la banda derecha. El ’17’ racinguista jugó a un toque para la caída de Yeray y este, desde la línea de fondo, dio el pase de la muerte para Jeremy, que anticipó a Quindimil y acarició la bola para mandarla cruzada a la red.
Acoso
El tramo final de partido fue un auténtico acoso del Bergan buscando el empate. Lemos dio entrada a Dieguito, que jugó arriba con Carlos; por fuera Pacheco y Pedrosa y Boedo de lateral izquierdo. Pedrosa empezó avisando con un tiro cruzado con la zurda desde la frontal. Boedo puso un córner en la cabeza de Carlos, que remató fuera. En el 93 el cuadro local tiró hasta tres veces sin éxito. La última fue de Sellés de puntera en otro córner de Boedo y después de que rematase en primera instancia Santi.
