Además del Día de Abonado, el partido de este sábado entre el Liceo y el Reus servirá para estrenar una nueva grada de animación en el Palacio de los Deportes de Riazor. Las tres peñas verdiblancas en activo, después de reunirse con el club y los capitanes, unirán fuerzas para aportar color y ambiente al pabellón en un día en el equipo coruñés necesitará estar muy arropado. Los Hulkerinos, la Barullo y la Dava Torres se situarán en la grada detrás de los banquillos, en la zona más allegada a la zona por la que la plantilla entra a la pista para que esta sienta el aliento desde el primer momento. Las tres quieren poner también su grano de arena para que cada vez sea más gente la que pueble las gradas y se acerque a ver los partidos de un equipo que estará en la lucha por todos los títulos a lo largo de este 2025.
“Antes del partido nos juntaremos todos, entraremos juntos y animaremos. A ver cómo sale todo. El Palacio necesita ese jugador extra en la pista”, dice Pablo Balboa, representante de la peña Barullo, que dice que su caso es bastante particular. “Hasta hace cinco años nunca había visto un partido de hockey. Yo no soy de Coruña. Fui un día a ver un partido con un compañero y ya me enganché. No me perdí ninguno más. Es un deporte muy dinámico. En fútbol, en noventa minutos te puedes perder 89 y no pasa nada. Aquí parpadeas y te pierdes algo. Es muy intenso”, señala.
Esa idea de que quien prueba, repite y se queda, la comparte Juan Dopazo, de Hulkerinos. “Con venir un día es suficiente, sobre todo a los niños. Los jugadores son súper cercanos con ellos y es una cosa que no ves en muchos sitios más. Después de los partidos hacen la ronda por todo el pabellón firmando autógrafos y sacándose fotos con ellos”, añade. Dopazo señala que hay buena sintonía con el club, que les ha conseguido un cuarto en el Palacio para guardar las pancartas y los bombos y no tengan que cargar con ellas en cada partido. Y recalca la idea de que serán una grada de animación respetuosa. “No queremos ninguna tontería. Somos una peña familiar y con niños. Animaremos, cantaremos, pero con tranquilidad”.
Además de estas tres peñas también está la Jordi Bargalló Sempre Liceo, de las más antiguas que sobreviven y con miembros ligados al hockey desde hace más de treinta años. También estuvo presente en la reunión con el club y que también aportará en la medida de sus posibilidades.
El Liceo tiene claro que quiere que mañana, aprovechando las vacaciones de Navidad, sea un día grande. El reparto de invitaciones a los abonados va a buen ritmo por lo que se espera una buena entrada.