Entrenador del Deportivo Liceo
Juan Carlos Copa Quiroga (A Coruña, 1970) es un entrenador ‘top’, un líder que encajaría en el vestuario de cualquier equipo grande, pero que eligió el Deportivo Liceo porque es el club de su vida. “Nadie me tiene que explicar lo que significa este escudo”, espeta Juan, un apasionado del hockey y una persona que dice las cosas claras. El técnico coruñés habló con este diario antes del último entrenamiento en Riazor previo a la Copa del Rey. Su equipo defiende el título que logró el año pasado en casa contra el Barça. Hoy se juega el pase a las semifinales contra el Reus. Ganarse o irse a casa. “Somos un club ganador”, avisa Juan, que sueña con volver a levantar la Copa.
¿Cómo llega el Deportivo Liceo a la Copa del Rey?
Igual que teníamos muy claro que a la Golden Cup llegábamos muy bien, en un momento perfecto, y competimos para ganarla, a la Copa del Rey no llegamos igual. Fueron muchos partidos seguidos y la semana posterior tuvimos que dar varios días de descanso a gente que lo necesitaba: Roby, Dava y otros jugadores tocados. En Manlleu hicimos una lista pensando precisamente en la Copa y creo que llegamos más o menos bien, con la única baja de Burgy, que nos afecta en la rotación, pero contamos con el Nanu (Castro).
¿Qué tiene la Copa?
Es muy bonita, es la fiesta del hockey y, lo primero que tiene, es que estamos todos en la misma sede, el mismo hotel y la misma pista. Hay siempre un ambientazo y se ven grandísimos partidos. Es un torneo espectacular a la par que duro y exigente físicamente. Nadie se puede dejar nada porque si no te vuelves para casa.
¿Qué te parece que la Copa del Rey y la Copa de la Reina se celebren en la misma sede?
Juntarnos todos es muy bonito, pero no sé si será lo mejor por un tema de horarios. Creo que el hockey femenino necesita su propio lugar. El pasado fin de semana, sin ir más lejos, lo de Gijón (3.200 personas llenaron el pabellón en la final de la Copa de Europa) salió en todos los periódicos. El deporte femenino, no solo el hockey, está en alza y hay que darle la importancia que se merece y los recursos para que se iguale con el masculino.
¿Te preocupa la posibilidad de jugar tres partidos en tres días consecutivos?
Hace mucho tiempo que he dejado de preocuparme por los calendarios porque es algo que no puedo controlar. Tenemos que adaptarnos y competir al máximo para ganar y pasar al día siguiente. Si no hay viernes, no hay sábado ni domingo.
El Reus es un equipo que siempre compite muy bien
Y el viernes os toca el Reus, el único equipo que en las dos últimas temporadas os ha ganado dos partidos, además del Barça.
Suelen ser partidos muy igualados: esta temporada ganamos aquí de un gol (4-3) y perdimos allí, también de un gol (5-4). Es un equipo que siempre compite muy bien, lleva mucho tiempo con el mismo entrenador (Jordi García) y esta temporada consiguió el fichaje de un gran jugador como es Sergi Aragonès. La única duda que tenemos es si puede jugar o no Raúl Marín, que no estuvo en la Golden Cup. Sin él perdieron por la mínima contra el Oliveirense y empataron contra el Noia.
¿Qué tipo de partido tienes en la cabeza?
El Reus es equipo ordenado, nos respeta y sabe que iremos a buscarlos. Creo que van a intentar controlar el ritmo para no dejarnos correr porque saben que nosotros somos muy verticales y físicos. Es un equipo que también puede defender en zona y tenemos que controlar la bola parada: con Marín o Marc Julià son muy peligrosos ahí. Estamos avisados de su potencial.
Hablas de Aragonès, Marín y Julià, ¿a qué jugador del Reus ficharías para el Liceo?
Ahora mismo no ficharía a nadie del Reus, pero tienen grandísimos jugadores: si te cuento la historia que tengo con Julià... en mi época con el Cerceda nos ganaba Campeonatos de España él solo con el Barça; a Aragonès lo quise traer para el Liceo, pero no pudo ser; Checo Compagno es un jugador que está creciendo y tiene muchísimo hockey; Raúl Marín… ¿qué te voy a decir?; Joan Salvat, un interior de los antiguos que cada cada bola que le cae por dentro, la portería es de primer nivel…
Hablemos del Liceo, ¿qué necesita para volver a levantar el trofeo de campeón?
Respetando al equipo contrario, creo que a veces nos centramos demasiado en ellos y tenemos que pensar más en nosotros mismos. Con respeto, pero sin miedo, necesitamos nuestra mejor versión para ganar los dos primeros partidos y llegar a para intentar volver a ser campeones.
¿Y cuál es esa versión?
Somos un equipo muy versátil y, para no ser previsibles, tenemos que encontrar el modelo de juego que queremos imponer en cada momento, buscando la mejor versión individual siempre al servicio del colectivo.
Normalizar esta situación no es de buen gusto
Roberto Di Benedetto (Benfica), Jordi Adroher (Oliveirense), Carles y Marc Grau (Barça), Jordi Burgaya, Maxi Oruste y Martín Rodríguez dejarán el Liceo al terminar la temporada. Juan Copa asume el cambio de ciclo y busca refuerzos para el nuevo proyecto.
Siete bajas para la próxima temporada, ¿tienes la sensación de un cambio de ciclo?
No tengo la sensación, tengo la certeza. Es evidente que hay un cambio de ciclo porque se nos va el 70% del equipo.
¿Cómo lo llevas?
Es complicado porque tengo un grupo maravilloso de jugadores, pero hay ofertas que son irrechazables. En otras, seguramente podíamos haber hecho algo más. Si queremos competir por todos los títulos tenemos que ser realistas: los grandes manejan unos presupuestos de auténtica locura y el mercado está muy complicado. Si estábamos habituados a que se fijaran en nosotros desde Portugal y ahora también se fija nuestro máximo rival en la OK Liga (el Barça), las cosas se complican más, pero esto es el deporte. Si queremos retener a nuestros jugadores e ir a buscar a los ‘top’ ya sabemos lo que hace falta.
¿Qué hace falta?
Triplicar el presupuesto. Hay ofertas contra las que no podemos luchar. Lo que me da rabia es normalizar esta situación cada cierto tiempo. No es de buen gusto.
¿Llegáis tarde al mercado?
Una cosa es que el mercado esté difícil, pero la camiseta del Liceo sigue siendo muy importante dentro del mundo del hockey y hay muchos jugadores que la quieren vestir. Todos los que vienen aquí crecen mucho. Y eso es lo que intentamos vender: la camiseta, la historia y el grupo de trabajo que tenemos aquí. Con la base que ya tenemos y los fichajes que podemos traer vamos a intentar seguir compitiendo.
