El Deportivo Abanca está obligado a reinventarse. Después del inesperado y espectacular estreno en Primera Iberdrola, el equipo blanquiazul ha atraído las miradas de los grandes clubes y no ha podido retener a algunas de sus mejores futbolistas. El equipo coruñés pierde a nueve jugadoras respecto a la pasada campaña, entre ellas varias piezas irreemplazables.
El técnico Manu Sánchez y el público más habitual de Abegondo echarán de menos a tres caras muy conocidas en el proyecto blanquiazul: la centrocampista Teresa Abelleira, la lateral izquierda Nuria Rábano y la central Miriam Ríos. Ellas son tres de las cuatro futbolistas que militaban en el Depor desde la creación del equipo en el 2016. Ya solo queda Cris de aquella plantilla original.
Con la marcha de Teresa, motor del juego ofensivo y especialista a balón parado, el Depor pierde una pieza clave en el fútbol de posesión y también pierde creatividad, imaginación y al mayor talento de la cantera gallega en la última década.
La pontevedresa anunció el martes su marcha y está por ver cuál será su destino –los mentideros del fútbol femenino la sitúan en el Real Madrid–, pero está claro que al Depor no le ha alcanzado para igualar sus pretensiones económicas.
Otra joya de nuestro fútbol es Nuria, que se destapó en el carril zurdo tras años como delantera o extremo. Sin ella, el Depor necesita una lateral izquierda –Villegas es la única para la posición– y pierde una opción muy fiable en la salida de balón y también pierde profundidad en ataque. El martes se hizo oficial su fichaje por la Real Sociedad.
Miriam, capitana, imagen de la última campaña de socios y alma del vestuario, deja un vacío más sentimental que futbolístico, ya que la pasada campaña apenas pudo disfrutar de minutos. Jugará en el Tacuense canario de Reto Iberdrola (Segunda División).
Más importante en el campo era la aportación de María Méndez, la central más utilizada por Sánchez en el debut de Primera y una futbolista de gran proyección. Su fichaje por el Levante responde a la lógica del mercado
Misa (suena para el Real Madrid), Miralles (Real Oviedo), Laura y Patri Díaz (Pozoalbense) y la japonesa Maya (de vuelta en su país) completan el capítulo de bajas.
