El Lugo cortó ayer su mala racha, que se quedó en ocho partidos sin ganar, y agravó la del Albacete, que va por siete, con un tanto del canario Cristian Herrera al cuarto de hora del segundo periodo.
Los lucenses, que duermen fuera del descenso, acertaron en su primer disparo a portería y aguantaron el empuje de los manchegos, que fallaron ocasiones claras antes del descanso, una de ellas al poste, y apretaron en los minutos finales, pero que se ven ya más cerca de las posiciones de descenso que de las que dan acceso a luchar por subir a Primera.
Después de la contundente goleada que se llevó ante el Almería (0-4) y la derrota por la mínima en Vallecas (1-0), Curro Torres insistió en su propuesta de juego y el equipo, en sus dudas en defensa, que ya pudieron costarle un disgusto en los primeros segundos de juego.
De vuelta a Lugo un año después de haber sido traspasado al Leganés, Kravets, con hambre, puso la quinta velocidad en el lateral izquierdo. Pudo ser objeto de un penalti a los cinco minutos, pero el VAR lo revisó y el colegiado no lo señaló. Los lucenses buscaron con mucha ansia el gol y al final obtuvo la ansiada recompensa.
