El mediapunta portugués Joao Félix, fichado este verano por el Atlético de Madrid, comenzó a dejar retazos de su calidad con un golazo de volea en la sesión de entrenamiento vespertina de ayer, en una jornada muy física para los rojiblancos.
En el partidillo, durante la última de las dos sesiones a las que se sometió el equipo como parte de su preparación para la nueva temporada, el joven futbolista de 19 años, por el que el Atlético se comprometió a pagar 126 millones de euros al Benfica, comenzó a dar algunas pistas de la calidad que atesora.
Arrancando primero desde la banda derecha, tuvo algún intento de combinación con su compañero Diego Costa antes de marcar un golazo de volea con la pierna izquierda al recibir un centro desde el costado zurdo del ataque, una acción recibida con asombro por parte de los casi 400 aficionados que presenciaron el entrenamiento.
El primer gol de Joao Félix en esta concentración y el único del partidillo de apenas 30 minutos con el que acabó el trabajo de la jornada, que comenzó bien pronto por la mañana, a las 8.30 horas en el gimnasio, y continuó 45 minutos después con una sesión de resistencia física de hora y cuarto sobre el césped.
Solo un futbolista, el centrocampista Koke Resurrección, se entrenó aparte del grupo, con una versión reducida del ejercicio previsto para la mañana y sin saltar al césped en la sesión de tarde, debido a que los preparadores rojiblancos pretenden dosificar los esfuerzos de sus futbolistas, aunque en el caso del vallecano ya son dos días seguidos con trabajo diferente al de sus compañeros.
Presenció la sesión vespertina el máximo accionista del club, Miguel Ángel Gil Marín, que estuvo en el borde del campo principal de Los Ángeles de San Rafael.
