El delantero francés del Real Madrid Karim Benzema dejó abierta la puerta a su retirada de la selección francesa con un enigmático mensaje en Twitter publicado un día después de que Francia perdiera la final del Mundial de Qatar contra Argentina.
“He hecho esfuerzos y los errores para llegar hasta donde he llegado y estoy orgulloso. He escrito mi historia y la nuestra acaba”, señaló sobre una foto vestido de la selección.
El mensaje deja abierta la puerta a su retirada internacional tras una tormentosa relación con la selección, que acaba con la lesión que le obligó a abandonar Qatar dos días antes del debut en el Mundial.
Toda la prensa francesa ha interpretado que el mensaje pone fin a la carrera internacional de un jugador que nunca ha tenido una buena relación con la selección.
Desde su salida de Doha el 20 de noviembre, su nombre ha planeado por la concentración francesa y las preguntas en conferencia de prensa al seleccionador, Didier Deschamps, han dejado ver el malestar que provoca su nombre.
El técnico, que no convocó a nadie en su lugar pese a que podía haberlo hecho, pasó del “sin comentarios” a asegurar que él solo se ocupa “de los que están, no de los ausentes”.
El jugador, que viajó directamente a Madrid desde la capital catarí y, tras unos días de vacaciones en la isla de La Reunión comenzó a ejercitarse con normalidad en las instalaciones de su club en Valdevebas, guardó silencio.
Se limitó a enviar ayer un mensaje de apoyo a la selección en las redes sociales.
El contacto con Deschamps está roto y parece que las relaciones volvieron a los tiempos de la guerra fría entre ambos.
L’Équipe aseguraba que el Balón de Oro no se sintió bien tratado por el seleccionador, que no le dio tiempo para recuperarse, ni por el cuerpo médico, que forzó demasiado su retorno al equipo tras los problemas que arrastraba en los meses previos al Mundial.
El entorno del futbolista considera que desde la selección se filtró el mensaje de que sin él en el grupo la convivencia mejoró, una teoría que negó Aurelien Tchouaméni.
