El Levante ya es equipo de Primera División y uno de los artífices de que el conjunto valenciano vuelva a la élite del fútbol español 
es Róber Pier, el central coruñés cedido por el Deportivo. El defensa, que se convirtió en un fijo en la zaga, atendió a dxt y no ocultó que le gustaría vestir la elástica blanquiazul. "Estoy encantado de jugar con el Deportivo y me gustaría volver, no sé si será el año que viene, pero me encantaría", comenta.
Asimismo, cree que con el bagaje obtenido este curso en Segunda podría ayudar al equipo herculino el próximo curso. "Me siento preparado, he ganado mucha confianza este año", apostilla Róber.
Lo estamos haciendo bien los jugadores a préstamo y tendremos nuestra oportunidad
En lo tocante a su futuro, el central, todavía con la fiesta del ascenso fresca en su memoria, se muestra cauto y prefiere no adelantar acontecimientos. "De mi futuro de momento no sé nada, estoy muy tranquilo, pase lo que pase va a ser bueno para mí", reseña y se muestra confiado: "No sé cuáles son las opciones pero seguro que serán las mejores para mí y para el Depor". Un equipo donde tanto el como otros muchos canteranos como el también central Insua, tuvieron que salir para 'foguearse' antes de buscar su sitio en el primer equipo. Una situación que Róber admite que ocurre: "Es difícil jugar en el Depor, hay mucha exigencia, es nomal, y a los canteranos les cuesta bastante últimamente", declara.
Lleva el defensa coruñés, 18 de ellos siendo titular, en los que ha visto una amarilla y una roja
Róber, sin embargo, desde el trabajo y la humildad comenta que los cedidos están haciendo "las cosas bien" y está seguro de que tendrán su "oportunidad". Matiza, no obstante, que "una vez llegas al Deportivo partes de cero" y tienes que "ganártelo cada día" en cada entrenamiento y partido para estar en el once.
Con el cansancio y la alegría, tras una noche muy larga, calificó el ascenso como "algo impresionante". "Según pitó el árbitro me tiré al suelo y cuando me quise levantar tenía encima a un montón de gente", comenta con una sonrisa.
Es difícil poder jugar en el primer equipo, hay mucha exigencia
No oculta que los inicios fueron complicados en el conjunto granota. "Al principio me costaba más jugar y fueron unos meses difíciles, pero al final me hice un hueco y eso me hizo sentirme uno más", reseña el defensa. Una salida que valora como algo muy positivo porque le ayudó a crecer como futbolista y persona. "Tenía que ganar experiencia, creo que era de lo mejor", asevera.
Sobre la temporada del Depor, puntualiza que ha sido de "altibajos" con momentos "buenos y malos de juego" y aunque está seguro de que el equipo "se va a salvar" subraya que el año ha sido "complicado" para los herculinos.
