El Deportivo logró dos de las tres dianas que le endosó al Zaragoza en jugadas de estrategia. Dos faltas cercanas al área, ambas desde la izquierda de la meta maña y las dos ejecutadas por Pedro Sánchez, que volvía al once, después de cinco jornadas de ausencia por lesión.
Uno de los goles lo transformó Borja Valle, con un disparo ajustado al palo derecho de la portería defendida por Cristian, y el otro un potente cabezazo de Domingos Duarte. Ambos tienen en común que los blanquiazules remataron el esférico en posición antireglamentaria, aunque el juez de banda no levantó el banderín.
La repetición de ambas jugadas alberga pocas dudas, sobre todo en el caso la del atacante berciano, lo que reabre el debate de la importancia de la instauración del VAR (videoarbitraje) en la Segunda División.
Jornada polémica
Una necesidad que en esta jornada se hizo latente también en otros encuentros, como en Las Palmas-Tenerife, con un penalti inexistente pitado en contra del conjunto ‘pío-pío’.
El propio Lucas Alcaraz declaró al término del encuentro que dos de los tres tantos blanquiazules habían sido “en fuera de juego” y la otra fruto de un “penalti absurdo”. Lo que está claro es que el cuadro herculino se ha convertido en un especialista en sacar partido de las jugadas de estrategia y se muestra casi infranqueable a balón parado.
La peculiar forma de defender instaurada por Natxo González, con la defensa muy atrasada, casi pegada a la línea de cal de la portería, está dando puntos al Deportivo, que apenas concede ocasiones en jugadas como faltas o saques de esquina, de las que se suele sacar petróleo en Segunda División.
En ataque, la eficacia por alto de jugadores como Domingos Duarte (cuatro goles) y Pablo Marí (dos) evidencia el poderío físico de una estrategia que ha dado puntos a los herculinos.
