La llegada de las vacaciones ha supuesto un punto de inflexión para Álvaro Pérez Campo, más conocido en el Deportivo como Trilli, que ha decidido poner fin al calvario en forma de lesión en el tobillo, que le acompaña desde hace meses, y pasar por el quirófano.
El jugador, lastrado por esta dolencia que le ha impedido jugar desde el pasado 12 de marzo, será intervenido en Barcelona y sometido a una artroscopia de tobillo.
Procedimiento
Esta se trata de una cirugía que utiliza una pequeña cámara e instrumentos quirúrgicos para examinar o reparar los tejidos dentro o alrededor del tobillo. La cámara se llama artroscopio.
Este procedimiento le permite al facultativo detectar problemas y hacer reparaciones a su tobillo sin realizar grandes cortes en la piel y el tejido.
Posteriormente y tras guardar reposo varios días en la Ciudad Condal, el lateral diestro viajará a A Coruña, donde se pondrá a las órdenes de los profesionales del Deportivo para iniciar la rehabilitación.
El problema principal de la dolencia para Trilli era que le hacía competir con dolor, algo que en su momento desveló Borja Jiménez, al ser preguntado por la lesión del zaguero.
“No tiene el alta médica, no se encuentra bien. Tiene la dolencia que le ha mantenido apartado y no está apto para jugar. Tiene una limitación importante en el pie. Está lejos de competir”, alertaba el preparador a finales del mes de mayo, cuando se acercaba el final de liga y el defensa seguía sin regresar.
Un paso atrás
El lateral había vuelto a sumarse a los entrenamientos con el grupo a principios de ese mes de mayo, pero las molestias no iban a menos y Trilli tenía que dar un paso atrás en su recuperación.
“No nota mejoría, no soy nada optimista. Por eso el club decide firmar un jugador (Antoñito). Ojalá mejore, pero la semanas pasan y no entrena. Nada hace indicar que su evolución en las semanas que quedan vaya a ser positiva”, comentaba entonces Borja, tras un nuevo revés en la recuperación del defensa de Ortigueira.
Las lesiones de Trilli y Victor García condicionaban de forma notable el juego del equipo, como posteriormente admitiría el técnico. El Deportivo pasaba de tener a dos jugadores por puesto, a quedarse sin efectivos en esa demarcación, con las salidas de Jorge Valín, cedido al Cornellà y la de Alberto Benito, traspasado a la Cultural Leonesa. Después de probar en esa posición a futbolistas como Lapeña o Villares, este último también lesionado y que tendrá que recuperarse de un esguince del ligamento lateral interno en su rodilla izquierda, la llegada de Antoñito suponía un alivio.
Trilli, con contrato hasta 2024 con el Deportivo, trabaja ahora para estar listo de cara a la próxima temporada y poder recuperar el tiempo perdido debido a una lesión que ha lastrado su progresión y buen momento en un Depor que le ha visto crecer.
