Participación directa en los cuatro goles del equipo herculino, en otro partido con recital a cargo de Lucas Pérez, que cerró la presente temporada anotando dos dianas y brindando otros dos pases de gol en el choque de ayer en Castalia, correspondiente a la vuelta de la Final de Campeones de Primera RFEF.
En feudo castellonense, el futbolista más desequilibrante de la categoría clausuró un año deportivo en el que se ha erigido como un coloso, con una segunda vuelta de fábula
El de Monelos presenta unas estadísticas de récord, con 16 tantos —doce en fase regular de Liga, tres en la Final de Campeones y uno en Copa— y la friolera de 19 asistencias.
Unos números que han catapultado a los deportivistas de vuelta al fútbol profesional, después de una segunda vuelta para enmarcar.
Precisamente el estallido de Lucas Pérez coincidió con la espectacular reacción del equipo tras el paso por el ecuador; no en vano, el ‘7’ estrenó su casillero particular anotador en la jornada decimoctava, ante la Real Sociedad B en el estadio de Riazor.
Desde ese choque, disputado el 4 de enero, el atacante blanquiazul se ha cansado de proporcionar alegrías al deportivismo, con el tanto con el que se cristalizó el ascenso ante el Barça Atlètic incluido.
Ayer en Castalia el festival de Lucas dio inicio en el minuto 28 con una picada de genio ante el meta local Gonzalo que supuso el 1-1.
Al filo del descanso, se sacó de la manga una asistencia más que generosa para que Mella elevase el 1-2, poniendo al canterano en una posición perfecta para perforar el marco contrario.
Nada más reanudarse la contienda, protagonizó la jugada del partido al robar a Medunjanin, conducir una contra y triangular con Villares para el 1-3. Antes de cerrar el envite con otro pase de gol a Davo, que selló el 1-4 a placer.