Mario Soriano ha sacado a relucir lo mejor de su repertorio futbolístico en el tramo final de la temporada, el más trascendental para el intento de ascenso a la Liga SmartBank.
En efecto, el pasado sábado ante el Linares, en la semifinal del playoff, revolucionó el encuentro en la segunda parte, después de haber sustituido en el minuto 46 al brasileño William de Camargo.
Un tanto de bandera suyo, el 2-0, después de ‘sentar’ a varios rivales, resultó vital para que el equipo obtuviese tranquilidad; además, brindó una asistencia en el 4-0 para que su compañero Alberto Quiles pusiese la guinda al choque.
Aunque el entrenador Borja Jiménez no quiso ofrecer pistas acerca de la alineación inicial que barrunta para el próximo sábado, lo cierto es que probó ayer en su once con la terna Soriano-Miku-Quiles en punta de lanza.
En la última semana de competición de la presente temporada 21-22 todavía quedan tres sesiones de entrenamiento, en las que el cuerpo técnico tendrá que adoptar decisiones importantes.
A lo largo del test matinal de ayer los futbolistas blanquiazules realizaron un hincapié especial en las transiciones y el remate a puerta.
Unas facetas del juego en las que el cedido por el Atlético de Madrid se mostró muy eficaz, al igual que su competidor en el puesto de extremo izquierdo, William de Camargo.
Los tres porteros blanquiazules, Ian Mackay, Pablo Brea y Alberto fueron sometidos a una continua oleada de centros y disparos con ambas piernas y también de cabeza, dejando constancia de la calidad bajo palos que atesoran los tres.
Después de un partidillo a tres cuartas partes de campo, el equipo puso fin a su primer día de actividad semanal tras una hora y veinte minutos.
