El Deportivo se encuentra a seis puntos del Racing de Santander y tiene la diferencia de goles particular perdida con los cántabros. Todo el deportivismo tiene presente ese dato y Borja Jiménez, el técnico blanquiazul, se muestra optimista en cada rueda de prensa respecto a las posibilidades del equipo de acabar la fase regular como campeón y, en consecuencia, lograr el ascenso directo. No parece sencillo teniendo en cuenta la fortaleza que está teniendo el Racing de Santander, los problemas del Deportivo y que quedan diez jornadas, que en la práctica son nueve porque cántabros y coruñeses tienen pendiente el choque de la segunda vuelta con el Extremadura, en el que sumarán los tres puntos.

La esperanza de acabar primeros y evitar el playoff de ascenso tiene precedentes y un integrante de la plantilla deportivista lo vivió en carne propia, el máximo realizador blanquiazul, el delantero Alberto Quiles, que contribuyó el pasado sábado a que el Deportivo se reencontrara con el triunfo en la cita con la Cultural Leonesa en el Estadio Abanca-Riazor. Él ya sabe el camino que necesita coger el conjunto herculino.

El dato lo aporta el ingeniero industrial y profesor de matemáticas Pedro González, que peina todos los registros de Primera RFEF en su cuenta de Twitter.

En la jornada 28 de la temporada 2018-19, en el grupo IV de Segunda División B, el Cartagena estaba al frente de la tabla con sesenta puntos (dieciocho partidos ganados, seis empatados y cuatro perdidos). Segundo era el Recreativo de Huelva, que sumaba 54 puntos, los mismos que el UCAM Murcia, que era tercero en la tabla. Onubenses y cartageneros habían igualado a cero los dos partidos, por lo que la diferencia de goles entre ellos estaba empatado y la general favorecía a los de Cartagena claramente (32 a 17).

Diez partidos después, cuando acabó la temporada, el Recreativo estaba al frente de la clasificación. No solo le había recortado los seis puntos al Cartagena, sino que además le había cogido otros tres. Los de Huelva acabaron con 78, los murcianos, con 75. Lo único que no acabó a favor del decano fue la diferencia de goles. Finalizó con 27 a su favor mientras que los de Cartagena lo hicieron con 35.

En aquel Recreativo estaba Quiles, que compartió vestuario con el exdeportivista Marc Martínez. La parte negativa es que a pesar de aquella gesta, el Recreativo no logró el ascenso. Perdió con el Fuenlabrada la eliminatoria de campeones y con el Mirandés se le escapó la segunda opción. Los burgaleses tenían como entrenador al actual técnico deportivista, Borja Jiménez, que logró el ascenso al fútbol de plata al superar al Atlético de Madrid B en cuartos de final, el Recre en semis y el Atlético Baleares en la final.

Tampoco le fue bien en la promoción al Cartagena, que estaba entrenado por el exdeportivista Gustavo Munúa. Superó en cuartos al Real Madrid Castilla y perdió después con la Ponferradina.

En el tramo de los diez últimos partidos de la fase regular, el Cartagena enlazó cinco sin ganar (dos empates y tres derrotas). Acabó con cuatro triunfos en cinco partidos, pero no fue suficiente.

En ese mismo periodo, el Recreativo firmó siete triunfos (acabó la temporada con seis seguidos) y tres empates.