El mediocentro blanquiazul, Diego Villares, reconoció su felicidad por volver a ver puerta con el Depor en casa.
“Marcar aquí en Riazor, delante de tanta gente, es algo que soñé desde pequeño y poder hacerlo es un orgullo. El portero le dio un pase a Bernal y pude estar cerca para robar, dudé en parar o seguir y ahí me salió bien”, comentó el de Villalba sobre la jugada del tanto.
Una diana que llevaba mensaje. “La dedicatoria es a mi familia y amigos que están siempre ahí cuando las cosas van mal y me apoyan siempre”, indicó el mediocentro.
Este curso suma tres goles y se mostró contento con su desempeño. “Estoy teniendo más suerte este año yendo más arriba, aunque ahora juego más atrás", comentó.
Y puso en valor el trabajo hecho por su compañero Olabe. “Olabe estaba haciendo u papel increible y por suerte pude hacerlo también".