Dieciséis clubes, entre los que no figura el Deportivo, pidieron en un comunicado a la Real Federación Española de Fútbol que se anule la votación sobre la “propuesta expuesta entendida como un todo”, que versa sobre el futuro de Primera RFEF.
“Consideramos que el plazo para la contestación es demasiado breve”, sostienen los firmantes como primera idea. “En un plazo de 48 horas es muy difícil convocar a los diferentes órganos de gobierno de nuestras entidades”, valoran.
Aseguran que no están en contra del “control económico de la competición” y dicen que les parecen “adecuadas las directrices generales” que se proponen en lo referente a licencia, auditorías, deuda y límites salariales.
Muestran su oposición, en cambio, a la “propuesta relativa al proceso al proceso de aprobación del convenio colectivo”, que les parece “adecuada y razonable” pero ponen en cuestión que la RFEF “se convierta en agente activo y dinamizador del proceso, pues carece de toda representatividad a esos efectos”. Eso supone, dicen, “la negación de la capacidad” de los clubes de “concertar acuerdos comerciales para el sostenimiento de sus economías”.
“No nos parece viable la imposición de modelos que coartan nuestra libertad de obrar o la firma de cheques en blanco para que se nos impongan reglamentaciones no acordes con la normativa”, apuntan.