Llegan las jornadas de horario unificado y eso solo puede significar una cosa. Se acercan los partidos que certifican y desestiman los objetivos de los equipos. En el caso del Dépor B, la meta estaba clara desde el inicio de campaña: ascender a Segunda Federación.
Para lograrlo, las cuentas de las blanquiazules están más que claras: tres puntos ante el Bovedana, octavo clasificado, servirían para abandonar la Tercera RFEF y confirmar su presencia en Segunda RFEF en la temporada 2025-26.
El calendario ha sido caprichoso y ha querido que, en la penúltima jornada liguera, Celta y Olímpico de León se enfrenten en A Madroa. Un duelo que puede suponer un atajo para el Deportivo en la consecución del título liguero.
El cuadro leonés afronta el choque con 72 puntos, uno menos que el conjunto de Óscar Orro; el vigués, con 69. De esta forma, la victoria de cualquiera de los dos equipos dejaría el ascenso en bandeja al filial blanquiazul, que tendría que vencer en tierras zamoranas para certificar el objetivo.
Ahora, con el playoff asegurado, el próximo domingo solo hay una opción: ganar para después celebrar.