El partido disputado el pasado miércoles en O Carral entre Sofán y Fabril (0-3) cerró por fin la larga lista de partidos aplazados y ya no queda ningún equipo con encuentros pendientes de cara a un tramo final de campeonato en Tercera RFEF que se presenta de infarto. Ni el ascenso directo, ni las plazas de playoff ni los puestos de descenso tienen dueños asegurados y todo se decidirá en un atracón final con cuatro jornadas que se disputarán en algo más de dos semanas, ya que habrá fútbol el próximo Jueves Santo. Quince días para reír o llorar.

Ascenso y playoff

El campeón del grupo 1 de Tercera RFEF logrará el ascenso a Segunda RFEF de forma automática. Un privilegio que se estrena este curso y que cuenta con tres candidatos: Polvorín, Somozas y Ourense CF.

El filial del Lugo (lider con 60 puntos) es el equipo que mejor lo tiene. Posee un punto más que Somozas (2º) y tres más que Ourense CF (3º). Además, puede permitirse una derrota en los cuatro últimos partidos porque le tiene ganado el golaveraje a sus dos perseguidores y el Somozas debe descansar en la última jornada.

El calendario de lucenses combina dos aspirantes al playoff (Rápido de Bouzas y Villalbés), un equipo en peligro (Noia) y un rival con los deberes casi hechos (Viveiro). Por su parte, el Somozas recibirá a dos conjuntos en la pelea por la salvación (Juvenil de Ponteareas y Alondras) y visitará a un complicado Barco. Mientras, el Ourense CF comparte con el Polvorín a Rápido y Villalbés pero antes se medirá a Silva (8º) y Estradense (9º).

Los siguientes equipos de la tabla ya no tienen opciones de título y ascenso directo, pero lucharán por disputar el playoff. Son Barco (4º con 48 puntos), Rápido (5º con 48), Villalbés (6º con 45) y Fabril (7º con 43), que parte en clara desventaja.

El filial blanquiazul necesitaría prácticamente hacer un pleno para optar a una de las dos últimas plazas de playoff. No obstante, tiene por delante uno de los calendarios más benevolentes en comparación con los de sus rivales directos. Visitará a un Arnoia prácticamente descendido y a un Estradense sin nada en juego, mientras que en Abegondo recibirá al Silva y al difícil Rápido.

Por su parte, el Barco debe visitar a un Alondras con la salvación cercana y recibir al potente Somozas. Posteriormente acabará contra un Arzúa en horas bajas y un Arnoia en Preferente salvo carambola épica.

El Rápido, además de al Fabril, se enfrentará a un necesitado Choco y a dos aspirantes al título (Polvorín y Ourense CF) en un final con gran dificultad. Son los mismos rivales que le quedan al Villalbés cambiando al Fabril por el Viveiro.

La sombra del descenso

Después del Estradense (8º), que está en tierra de nadie, aparece un Viveiro (9º con 34 puntos) que encabeza una lista de equipos que acarician la permanencia. El club de A Mariña tiene un colchón de ocho puntos sobre el descenso directo y siete sobre el décimo cuarto puesto, que podría suponer la caída a Preferente si no hay otro ascenso de un equipo gallego a Segunda RFEF además del campeón. Es decir, el Viveiro incluso podría salvarse sin volver a sumar.

En una tesitura similar está el Silva (10 con 33 puntos). Al club coruñés le debería bastar con lograr una victoria en los cuatro compromisos que le quedan ante un potente Ourense CF, un irregular Fabril, un Sofán que probablemente estará descendido y un Juvenil en problemas.

El Alondras (11º con 33) tiene los mismos puntos que el Silva pero cuenta con el hándicap de contar con solo tres encuentros en este final de liga. Necesitaría ganar al menos uno para acabar tranquilo, pero sus rivales no son nada sencillos: dos aspirantes al ascenso (Barco y Somozas) y un equipo necesitado (Arzúa).

El Choco (12º con 32 puntos) y el propio Arzúa (13º con 31) siguen fuera de los puestos de peligro, pero no se pueden relajar ante una posible remontada de Noia (14º con 27) o Juvenil de Ponteareas (15º con 26). El cuadro de Redondela debe enfrentarse a Estradense, Rápido, Villalbés y Noia, mientras que el cuadro de O Viso, que atraviesa una dinámica nefasta, se medirá a Sofán, Juvenil, Barco y Alondras.

El Noia ocupa actualmente el puesto que obliga a esperar al ascenso de otro gallego para celebrar la permanencia. Una angustia que los de Iván Carril esperan evitar, aunque no lo tienen sencillo porque deben remontar cuatro puntos o más con solo tres partidos por delante. Viveiro y Choco a domicilio y Polvorín en casa conforman la complicada tarea del Noia.

Por su parte, el Juvenil tiene la posibilidad de recortar al Arzúa en un duelo directo, además de finalizar la liga contra dos rivales que probablemente no tengan nada en juego (Arnoia y Silva). Eso sí, este fin de semana visita al Somozas.

Los dos últimos puestos son para Atlético Arnoia (16º con 18 puntos) y Sofán (17º con 17º). Ambos están casi desahuciados y necesitan una remontada histórica para tener opciones de alcanzar el décimo cuarto puesto y después esperar otra ayuda en forma de ascenso de un gallego. Una utopía que cuenta con un duelo entre ellos en la jornada 32 en medio de este final de liga emocionante y atropellado.