El presidente del COI, Thomas Bach, rreiteró al término de dos días de reuniones del Comité Ejecutivo que ni cancelar ni posponer los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 debido a la epidemia de Covid-19 están actualmente sobre la mesa.
Bach sí reconoció que la epidemia está afectando a torneos clasificatorios de varios deportes, lo que podría implicar cambios en las reglas de clasificación e incluso obligar a aumentar las cuotas de competidores invitados en determinados deportes. “Algunos deportistas podrían verse imposibilitados de participar en torneos de clasificación, así que hablaremos con las federaciones afectadas para buscar soluciones, que podrían significar un aumento de las cuotas”, subrayó.
Esto significaría que algunas federaciones tengan que invitar directamente a los Juegos a deportistas que bajo sus baremos seguramente se habrían clasificado para Tokio 2020 si su torneo de clasificación no hubiera sido cancelado, explicó el dirigente.
Bach y el resto de miembros de la Ejecutiva del COI fueron informados ayer por el comité organizador de Tokio 2020 sobre los preparativos con miras a la cita deportiva, prevista del 24 de julio al 9 de agosto.
“Pudimos ver que el comité organizador, el gobierno de Tokio y el de Japón tienen confianza; y que las decisiones que están tomado se han hecho de forma muy responsable y tras deliberación”, concluyó.
El Gobierno nipón confirmó que continúa adelante con el plan de organizar los Juegos, aunque admite que atenderá siempre las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y que ha firnado un acuerdo con el COI por el que el organismo rector del olimpismo solo tiene potestad de cancelar los Juegos en caso de que no hubiera opción de organizarlos en 2020.
Giovanni Malagó, presidente del Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI) y miembro del COI, aseguró eque “de momento no hay contraindicaciones” para la normal celebración de los Juegos. Malagó admitió que está viviendo semanas complicadas a nivel de organización, pues muchos de los atletas italianos están teniendo problemas con los visados para poder entrenarse fuera de su país. Algunos jugadores de voley playa vieron denegado el permiso de viajar recientemente a Qatar, explicó el directivo italino, quien definió la situación como “una locura”.