El moscovita solo había ganado hasta ahora tres torneos ATP 250, dos de ellos esta temporada, Marsella y Moscú, ambos bajo techo, pero en París superó a cuatro jugadores top-10, el último un Djokovic afectado por las tres horas de la semifinal que disputó la víspera contra Roger Federer.
Khachanov, que se revela como un seguro de vida en finales, puesto que no ha perdido ninguna de las cuatro que ha disputado, inscribió su nombre en el palmarés de un torneo que su paisano –con quienya le comparan– Marat Safin ganó en tres ocasiones (2000, 2002 y 2004), para convertirse en el primero de esta nacionalidad que gana este torneo, desde que en 2006 lo hiciera Nikolay Davydenko.
Khachanov sustituye en el palmarés al estadounidense Jack Sock y se convierte en el tercer tenista que alza el trofeo sin ser cabeza de serie, el primero desde que en 2007 lo hiciera el argentino David Nalbandian al batir a Rafa Nadal.
Sólo una semifinal
Hasta esta edición de París, Khachanov solo había disputado una semifinal de un M1000, la de Toronto este año, donde cayó ante Nadal. Contraste con ‘Nole’, que disputaba su 47ª final de en busca de su título número 33 que le igualara con Nadal. Precisamente, la última derrota del de Belgrado había en octavos de final del propio torneo canadiense, ante el griego Stefanos Tsitsipas.
Gesticulante y apagado, el jugador serbio no paró ayer de sonarse la nariz, mientras martilleaban los raquetazos de un Khachanov que no se apiadó de su rival.
“No he podido recuperarme, pero no quiero hablar de eso. Quiero hablar del nivel que Karen ha mostrado esta semana. Mereció ganar este partido. Ha demostrado el motivo por el que vamos a verle mucho en el futuro”, declaró Djokovic.
El ruso necesitó una hora y 37 minutos para ganar su primera final de un Masters 1000 ante el que es, sin duda, el tenista más en forma del momento. En una temporada que comenzó como 45 del mundo y acabará como 11, llamando a las puertas de un top-10 que puede ser su hábitat natural en los próximo años.
Esta temporada parece haberse desbloqueado su instinto ganador, que se escondía contra los grandes del circuito. En París ha vencido por vez primera a un top-5, el alemán Alexander Zverev, pero también al estadounidense John Isner, y al austríaco Dominic Thiem, finalista del último Roland Garros, además de al serbio Filip Krajinovic, finalista de este torneo en 2017.