El expresidente blanquiazul Augusto César Lendoiro emitió ayer un comunicado al respecto.
“Sería injusto. Sólo los que le hemos dedicado casi media vida a ese fútbol sabemos del esfuerzo titánico de esos directivos, entrenadores, animadores, utilleros... que realizan un extraordinario trabajo de forma altruista y anónima”, arranca el texto redactado por el que fuera dirigente deportivista entre 1988 y 2014.
“Es ésta, la de estos voluntarios excepcionales, una especie en grave peligro de extinción (...)Todos ellos llevan a cabo una increíble labor social, casi nunca reconocida por las instituciones públicas y pocas veces, en el ámbito futbolístico, por un R.C.Deportivo, beneficiado principal de la labor de captación y preparación que realizan estas entidades”, subraya.
“He tenido la oportunidad, y espero haberla aprovechado, de hacerles algo de justicia tanto en mi paso por la política, con la construcción de nuevos campos de fútbol, mayor apoyo económico... como en el Deportivo, en el que, hace 30 años, el Consejo, por unanimidad, propuso la firma de un convenio que los decanos del fútbol modesto habíamos pedido de forma insistente, y sin éxito alguno, durante varios lustros”, recuerda el exmandatario.
“Celebro con orgullo que nuestro último acto oficial como Junta Directiva del RCD, integrada casi en su totalidad por gente criada en el fútbol modesto, fuese abonar a esos clubs -estando en Segunda, sin recursos económicos y en pleno duro concurso de acreedores- más de 100.000 €, que era la cantidad que, según el Convenio, les correspondía por su trabajo durante la temporada 2013-14”, indica.
“Y ahora, cuando se anuncia un recorte que no se debería producir, porque pocas aportaciones pueden ser más necesarias y justas, le pido de forma encarecida al presidente que, en un gesto de cierta generosidad, no reduzca las ayudas a los clubes por el hecho del descenso, aunque así se recoja en el convenio firmado. La reducción en el presupuesto blanquiazul significaría pura ‘calderilla’ y se trataría de un gesto que no se entendería, toda vez que ya bastante se les ha venido reduciendo estos años”, añade el exmandatario.
“Nunca debemos olvidar que, si pretendemos conseguir la unión del deportivismo, cada club modesto cuenta con el cariño de todos los amantes del fútbol, al tiempo que sus locales han venido representando el lugar de reunión y el centro de la vida de cada barrio coruñés”, ensalza Lendoiro.
“Ese es el mejor camino para lograr la unidad de acción en la capital, al igual que en la provincia la bandera la enarbolan esos miles de niños de los colegios de nuestros 93 concellos que celebraban “de valvulina” los éxitos internacionales y nacionales del Depor... y hoy, gracias a todas aquellas invitaciones, infinidad de ellos integran las listas de nuestros accionistas y abonados”, continúa el comunicado.
“Si estamos trabajando en reconstruir la unión del deportivismo, resultaría de lo más incongruente que hiciésemos volar los cimientos de la base de nuestro sentimiento colectivo. El titular nos lo ofrecía a principios de los ochenta un directivo deportivista, el Doctor Ricardo Hortas, cuando pronunció una frase brillante, que siempre recuerdo : ‘tiene que hervir la olla del fútbol coruñés’”, en alusión a unir el equipo profesional y los clubs modestos. En aquel momento no sólo la olla no hirvió sino que se enfrió hasta límites insospechados. Esperemos que ahora no se cometan los graves errores de entonces y alcancemos el objetivo que había soñado, y no pudo conseguir, el afamado galeno”, sentencia el expresidente del Deportivo.