Victoria balsámica del filial del Deportivo tras la derrota y las dudas en su último encuentro frente a la Gimnástica Segoviana, ante la que perdió por la mínima hace una semana en La Albuera. Los goles de Uxío y Edu Expósito, de penalti, fueron suficientes para que el Fabril ganase al Adarve, sumase tres puntos y pudiese dormir en la primera posición.
El primer gol de los locales llegó cuando tan sólo se habían jugado cinco minutos de partido y fue obra de Uxío da Pena.
El equipo visitante supo responder rápidamente al gol inicial de los de Gustavo Munúa y en el 12, los de Víctor Cea empataron el partido. Cadete remató al palo y en el rechace, entre Iván Mateo y el defensa deportivista Raúl, acabaron llevando el balón al fondo de la red (1-1).
El nivel del Adarve
Los del barrio del Pilar fueron superiores tras el gol del empate y tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador. La más clara, de Fran García en el 26 cuando estuvo apunto de aprovecharse de una falta de entendimiento entre Raúl y Fornós. No obstante, en el min.30 llegó el gol del 1-2 para el cuadro local que acabaría dándole los tres puntos a los locales. Edu Expósito marcó de penalti tras que el colegiado cántabro Pozueta Rodríguez señalara penalti un derribo sobre Martín Bengoa. Con este resultado llegaron los equipos al descanso con un Adarve que realizó una gran primera mitad y que en ocasiones fue superior en el Mundo del Fútbol a un Fabril un tanto sorprendido.
En la segunda mitad el guión cambió. El Deportivo Fabril se hizo con las riendas del partido y disfrutó de las ocasiones más claras. De hecho pudo aumentar la renta en varias ocasiones. El peligro llegó especialmente a través de contragolpes y de jugadas a balón parado. En los minutos finales del partido, los visitantes apretaron y tuvieron una ocasión clara en el minuto 86 cuando Garci, que había entrado en la segunda mitad, disparó pero su remate fue desviado por el jugador local Romay.
Finalmente victoria local muy importante para afianzarse en las posiciones de ascenso de categoría de un equipo que se volvió a mostrar muy fuerte en Abegondo, donde no pierde desde que cayera en la primera jornada de la segunda vuelta ante un Fuenlabrada que, por aquel entonces, era líder del grupo.