El pésimo momento del Deportivo coincide con el bajo rendimiento individual de la plantilla. Lo acusa, especialmente, Vicente Gómez. El canario firmó uno de sus peores partidos como deportivista, muy lejos de la versión que fue capaz de dar al principio de la temporada, antes de que unas molestias le apagaran.
Ante el Almería, Natxo González apostó por doble pivote con el canario al lado de Didier Moreno. Pulmón suramericano y creatividad insular. La mezcla, a priori, podía salir bien, pero no cuajó.
Mientras el colombiano, por primera vez en su posición, firmó su mejor partido como blanquiazul, algo que tampoco era muy complicado, el canario no estuvo fino en el césped del estadio de Riazor. Voluntarioso, pero mal posicionado en las coberturas, demasiado horizontal y errado cuando buscó la vertical.
Ayer, los titulares, con Fede Cartabia al margen, trabajaron a menor ritmo y todos se fueron al vestuario antes del mediodía. Todos, menos uno.
Vicente Gómez se quedó en el césped. Primero, en el segundo campo, donde dialogó con uno de los miembros del cuerpo técnico durante unos minutos.
Posteriormente, se acercó al tercer campo. Allí se entrenaba el resto de la plantilla a las órdenes de Natxo González.
Durante cerca de una hora, es decir, el resto del entrenamiento, el centrocampista y el preparador deportivista intercambiaron impresiones a unos metros de distancia del espacio que ocupaba el grueso de la plantilla, que en ese momento disputaba partidillos en espacio reducido.
A ambos se les vio gesticular en la conversación, dando explicaciones y buscando las opiniones del otro. Vicente fue, junto a Quique González, una de las apuestas fuertes en las incorporaciones el pasado verano, en el que casi todos los jugadores llegaron libres o cedidos. Por el insular, el Deportivo pagó traspaso. Llamado a ser pieza importante en el rombo de Natxo, ha bajado sus prestaciones en el césped.
El exjugador de la UD Las Palmas ha disputado 23 partidos, 20 de ellos como titular. Como deportivista todavía no ha visto puerta y solo ha sido capaz de dar una asistencia.
Sus números están por debajo de lo que de él se esperaba. Tras haberse perdido las citas con el Tenerife, el Granada y el Nàstic, reapareció ante el Málaga en los últimos quince minutos, disputó 23 ante el Alcorcón en Riazor, fue titular ante su exequipo, la UD Las Palmas, y repitió en la formación inicial, pero con distinta posición y pareja, en la cita con los almerienses.
