Todo estaba de cara para Charles Leclerc y Ferrari en el GP de Bahrein; sin embargo, las carreras no entienden de lógica y méritos. Pese al gran fin de semana del monegasco, los aparentes problemas técnicos en la unidad de potencia del ferrarista facilitaron el trabajo de Lewis Hamilton para lograr su primer triunfo del año.
Leclerc dominó hasta los últimos compases de carrera, incluso adelantó a Sebastian Vettel en pista tras perder el liderato en la salida. Desde luego, la carrera del alemán es para olvidar. No estuvo al nivel de Leclerc y trompeó cuando peleaba con el inglés.
Vettel arrancó mucho mejor que Leclerc. El alemán consiguió superar a su compañero antes de llegar a la primera curva para situarse como líder. Por detrás, toques entre algunos monoplazas. Carlos Sainz era sexto, con un ritmo muy parejo al de Max Verstappen, que rodaba justo por delante del McLaren.
El madrileño presionó al holandés. El de Red Bull aguantó, se tocaron, el alerón delantero de Sainz estaba dañado y el tenía que pasar por boxes. Una verdadera lástima, pues estaba mostrando un ritmo muy competitivo.
Por delante, Leclerc no se venía abajo. Se pegó a la estela de Vettel y le adelantó como un obús. Volvía a colocarse como líder y comenzaba abrir un considerable margen con el alemán. El baile de paradas no tardaría en comenzar y muchos pilotos se verían obligados a pasar dos veces por la calle de boxes. En el ecuador de la prueba, el joven piloto monegasco ya estaba a ocho segundos se ventaja.
Con Leclerc alejándose, el foco se centró en la pugna entre Vettel y Hamilton. El vigente campeón se ponía en paralelo con el alemán, que trompeó, perdía la plaza y, metros después, el alerón delantero.
La carrera se tornó en contra de Leclerc en las últimas vueltas. El monegasco tenía un problema de potencia, posiblemente una pérdida eléctrica en el motor. Hamilton se acercó poco a poco para meter el hachazo sin mayores problemas; Leclerc no podía defenderse. Poco después, Valtteri Bottas repetiría la acción.
La sangría de posiciones de Leclerc podría haber sido mayor de no ser por el coche de seguridad en las últimas vueltas. Mientras, Sainz abandona cuando rodaba decimoséptimo. Una lástima para el madrileño, pues había mostrado un gran ritmo desde el inicio.
La prueba terminó con Hamilton en lo más alto, comandando el doblete de Mercedes. Leclerc, tercero, aunque con la sensación en el ambiente de llevarse un resultado totalmente inmerecido tras un fin de semana fantástico. Verstappen fue cuarto y Lando Norris, sexto, confirmando en buen ritmo del McLaren.
Bottas defenderá el liderato en la próxima cita, el GP de China, del 12 al 14 de abril en el circuito de Shanghai.