Una de las pocas dudas que tiene Fernando Hierro para su segundo partido como seleccionador la representa Dani Carvajal, recuperado totalmente de la lesión muscular que sufrió en la final de la Liga de Campeones, y listo para volver a competir ante Irán 25 días después.
El 25 de mayo, sobre el césped del Olímpico de Kiev, fue el último entrenamiento de Dani Carvajal antes de reencontrarse con una maldición que le persigue en finales. Otra vez antes de tiempo fuera. Una nueva lesión muscular. Las lágrimas reflejaban la rabia de tener que marcharse de una cita igualada ante el Liverpool y el miedo a perderse el Mundial de Rusia al que llegaba como miembro de la guardia intocable de Julen Lopetegui.
Opciones de reaparecer
El que era seleccionador no dudó en integrarlo en la expedición que volaría a Krasnodar. Es el dueño de la banda derecha y esperarían el tiempo que hiciese falta si podía aportar durante el torneo. Sabía que no podría contar con él ante Portugal, pero que la rotura muscular en el isquiotibial era pequeña y ante Irán, en la segunda jornada, había firmes opciones de que pudiese reaparecer. Es el panorama que ahora encuentra Hierro. Siguió el plan de ruta establecido ante la vigente campeona de Europa después de ver que Carvajal era novedad en el último día de entrenamiento de Lopetegui antes de ser despedido.
Desde su regreso al grupo el lateral madridista ha trabajado a destajo. Sobre el césped y con trabajo invisible, el descanso más las largas sesiones de gimnasio. Y está listo para reaparecer.
El 20 de junio se alcanzarán 25 días sin competir, un factor que debe decidir Hierro si es clave o pasa a un segundo plano. Irán exigirá menos defensivamente que Portugal y un Cristiano Ronaldo en plenitud que representaba un examen durísimo para un jugador sin ritmo de partidos. El combinado nacional regresó ayer a los entrenamientos, tras disfrutar el sábado de una jornada de descanso. Un entreno sin la presencia de Pepe Reina por unas molestias cervicales.
El portero del Nápoles no se ejercitó con el resto de sus compañeros y dejó el grupo en 22, por unos problemas en las cervicales, según informó la Federación. Ante Portugal, mostraba un vendaje compresivo en su pierna derecha a la altura del gemelo.