Alba Merino Sánchez (15 de mayo del 1989 – Guadiana del Caudillo, Badajoz) aúna garra, talento, veteranía y gol. Después de 15 años en la máxima categoría con el Puebla (2003-07), el Atlético (2007-11), el Levante (2011-17) y el Santa Teresa (2017-18), el año pasado llegó al Depor Abanca para guiar a las más jóvenes. Clave en el histórico ascenso a Primera, en su regreso a la élite es una de las capitanas y figuras del equipo revelación.
La centrocampista extremeña es feliz en A Coruña y dice haber descubierto su mejor versión. Se pone seria cuando habla de la huelga y las reivindicaciones del colectivo, pero se considera una privilegiada porque ha conseguido vivir del fútbol, aunque cuando cuelgue las botas quiere ser maestra. En el Depor está a jornada completa, como casi toda la plantilla, un paso adelante: “Del sueldo solo se habla si me lo preguntan en La Resistencia", sonríe. Es su momento.
El Depor es el mejor debutante de la historia con el actual formato de competición, ¿habías vivido algo así?
Nunca. Lo que estamos haciendo es súper difícil. Al principio de la temporada pensaba que íbamos a sufrir y soy la primera sorprendida por este arranque, no solo por los resultados, si no por el nivel de juego, marcando muchos goles y recibiendo pocos.Y creo que no lo valoramos ni disfrutamos lo suficiente. Este equipo está tan acostumbrado a ganar que las victorias no se celebran como debería.
No pierde en competición oficial desde el 25 de marzo de 2018, ¿puede pesar esa costumbre de ganar cuando llegue la primera derrota?
Es increíble, yo no he perdido ni un solo partido oficial desde que estoy aquí, pero somos conscientes del trabajo que estamos haciendo. Sabemos que estamos en una liga profesional y muy competitiva y que perder es lo normal.
Lo que estamos haciendo es súper difícil, pero este equipo está tan acostumbrado a ganar que no se celebra como deberíamos
La exposición mediática es cada vez mayor, ¿cómo lo llevas?
Es muy bonito que hablen tanto de nosotras en los medios de comunicación y que salgamos en las portadas cada fin de semana. Ya lo hemos normalizado, pero hay que disfrutar este momento, no quiero que se normalice.
¿Sientes que le habéis ganado al Tacón o al Real Madrid?
Es verdad que tiene el presupuesto del Real Madrid, pero todavía es el Tacón. Hasta que no lleve el escudo y la equipación no es el Real Madrid.
¿Cuáles fueron las claves de la victoria?
Los tres goles de la primera parte, sobre todo el de Gaby, que llegó pronto, y el segundo, casi a continuación. A ellas les pesaron los resultados anteriores, empezaron a brazear y hacer malos gestos. Es un equipazo con jugadoras de nivel top, pero que no funciona como grupo.
¿Cómo recuerdas el 2-0?
Veo que Tere recibe el balón y sé que, cuando lo tiene, puede darme el pase que le pido. Lo metió donde yo quería, miré que la portera estaba adelantada, pensé en picársela y salió bien.
¿Dedicatoria especial?
Siempre le dedico los goles a mi tía Luli, que falleció hace unos años.
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— Primera Iberdrola (@PrimerIberdrola) October 28, 2019
Cuatro goles en siete partidos, ¿sorprendida?
Nunca había tenido un inicio así. Sí que había llegado a la cifra de diez o doce goles en una temporada completa. En el Depor tengo más libertad porque antes jugaba de pivote, llego al área y estoy viendo el gol con facilidad.
¿Qué papel juega Iris en la libertad que tenéis tú y Teresa?
Nos da el equilibrio, la seguridad y la tranquilidad que necesitamos. Es como el Casemiro del Madrid, que hace todas las coberturas y está en todos lados.
Manu repite el mismo once inicial casi cada semana, ¿fatiga?
De momento no, yo ahora mismo me encuentro muy bien. Creo que la adrenalina de los partidos hace que lo aguantemos todo.
¿Dirías que estás en el mejor momento de carrera?
Sin duda es el mejor momento de mi carrera, viviendo lo que nunca había vivido y disfrutando muchísimo del fútbol. Venir al Depor es la mejor decisión que he tomado en toda mi trayectoria. Llegué con el objetivo de ascender, se consiguió de manera casi perfecta y ahora, esto. Mejor no me podían haber salido las cosas. Ni en sueños.
Eres una de las futbolistas más veteranas y la que tiene más experiencia en Primera en una de las plantillas más jóvenes de la liga, ¿es una responsabilidad o un peso mayor en el vestuario?
Tengo más experiencia y puedo aportar algún consejo, pero aquí todas las jugadoras son importantes.
Es el mejor momento de mi carrera y venir al Depor es la mejor decisión que he tomado en toda mi trayectoria
¿Eres de dar consejos?
Sí, pero aparte, no soy de las que suele hablar en grupo. Me gusta darles consejos a las más jóvenes. Son futbolistas de muchísima calidad y les digo que no se vengan abajo si las cosas no salen porque el fútbol sigue y tienen oportunidades cada fin de semana.
¿Te ves reflejada en las Teresa, Nuria, María Méndez o Athenea?
Sí. Hasta hace nada, entre comillas, yo era la niña del equipo. Ahora me siento la mayor, pero he estado en su situación y no llegan a valorar lo que están viviendo y lo que les queda por delante. Ojalá pudiera volver a vivirlo otra vez.
Tienes 30 años, ¿piensas alguna vez en el final de tu carrera?
Lo pensé hace unos años, pero desde que estoy en el Depor vuelvo a tener ilusión. Estoy viviendo una segunda juventud, estoy muy contenta y ya no pienso en dejar el fútbol.
Eres licenciada en TAFAD, graduada en Educación Primaria en la especialidad de Pedagogía Terapéutica y tienes un máster en Discapacidad Intelectual, ¿tu futuro está lejos del fútbol?
Me ha rondado hacer el curso de entrenadora para seguir ligada al fútbol de otra manera, pero siempre he querido ser maestra y cuando cuelgue las botas empezaré a preparar las oposiciones.
¿Has conseguido vivir del fútbol?
Sí, me siento una afortunada porque desde que salí de casa a los 18 años vivo del fútbol. No todas las futbolistas pueden decir esto. Algunas no llegan a fin de mes, incluso ahora. De ahí que pidamos un convenio colectivo.
Somos profesionales todo el día, no solo cuando entrenamos. Nos cuidamos desde que nos levantamos hasta que nos acostamos
¿Por qué vais a la huelga?
Somos futbolistas profesionales todo el día, no solo el rato que vamos a entrenar. Nos cuidamos desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. No pedimos el 100% de la jornada, lo hemos rebajado porque los clubes no pueden asumirlo, pero una reducción del 75% y un salario mínimo es algo digno para nosotras.
¿Cumple el Depor con lo que pedís las jugadoras?
Estamos bastante bien, no tenemos queja. Es uno de los clubes que mejor está en Primera y de los que menos afectado se vería por el convenio.
¿Cuál es vuestra jornada laboral?
En el Depor estamos casi todas a jornada completa (19 de las 21 futbolistas de la primera plantilla blanquiazul, según ha podido saber este diario), de ocho horas al día, 40 a la semana. Nunca había tenido estas condiciones.
Y aún así secundas la huelga.
La secundamos porque vamos todas a una, somos como un mismo equipo, incluso las jugadoras del Barça, el Atlético o la selección, que no tienen problemas.
Hablas de la selección, ¿alguna jugadora del Depor podría haber jugado con la Roja el partido de Riazor como pidió mucha gente por redes sociales?
A la selección van las mejores, las que el seleccionador considera que están mejor. Y no porque se haya jugado aquí tenía que ir una futbolista del Depor. ¿Era el momento?, igual sí, pero es su decisión y hay que aceptarla.
Iris, Tere, Cris o Peke están a un nivel altísimo y no desentonarían en la selección española
Hoy sale una nueva lista de la absoluta, ¿crees que tienes alguna posibilidad?
Me haría mucha ilusión y a mi edad más, pero hay compañeras que también se lo merecen: Iris, Tere, Cris o Peke están a un nivel altísimo y no desentonarían en la selección española.
El domingo jugáis contra el Atlético, ¿cómo ha cambiado desde tu etapa entre 2007 y 2011?
De aquel equipo creo que solo queda Amanda y las cosas han cambiado muchísimo, sobre todo en el presupuesto. Ahora tiene jugadoras de nivel mundial. No es un equipo de nuestra liga. Sabemos que Barça, Atlético y Levante están muy por encima, pero vamos a disfrutar, competir y a intentar ganar. No tenemos nada que perder.
¿Qué recuerdos tienes de tus años allí?
Fue una época muy bonita, era la primera vez que salía de casa y estuve cuatro años en los que maduré muchísimo como persona y como futbolista.
Dice José María García que el fútbol femenino es una mentira, ¿qué le dirías a la gente que piensa como él?
Les diría que se acerquen a ver un partido de fútbol femenino para opinar porque no creo que hayan visto uno en su vida. No he leído demasiado del tema, el titular ya me echaba para atrás.
Llegará el momento de jugar en Riazor, pero en Abegondo nos sentimos como en casa