El exportero del RC Deportivo, el Real Betis y el Granada Juan Ignacio Otero Couceiro ha fallecido en la madrugada de ayer sábado a los 90 años, ha informado el club coruñés, al que defendió entre 1952 y 1958. Otero nació en A Coruña el 1 de junio de 1929, fue subcampeón de España de natación en cien metros espalda y se incorporó al Deportivo con 17 años tras haber jugado en el Liceo de Monelos.
Sucesor de otro gran guardameta del Deportivo, Juan Acuña, disputó seis temporadas en el filial blanquiazul en la década de los cuarenta, el CD Juvenil. Nuestro colaborador Pepe Guillín había escrito en dxt campeón un artículo que reproducimos bajo estas líneas.
Juan Ignacio Otero, un portero de categoría
Juan Ignacio Otero nación en A Coruña, se casó con Isabel Cervero Arroyo, que casualmente falleció hace poco tiempo. Otero tuvo una familia numerosa e infinidad de nietos.
Este gran portero dio sus primeros pasos en equipos infantiles que jugaban sus partidos, muchos de ellos, en el célebre campo de ‘La Luna’ del Barrio de la Calle Hércules. Por cierto, en ese campo se celebraban campeonatos infantiles organizados por Eladio Naya, un árbitro que llegó a figurar en la Segunda División del fútbol español y que más tarde presidió el Colegio Gallego de Árbitros.
El primer equipo modesto que defendió el gran portero fue el Liceo de Monelos, que fue el equipo que inauguró el campo de los modestos, ‘La Granja’, contra el Silva.
Otero, aparte de haber sido un gran portero, también fue un formidable atleta destacando en diversas modalidades, por ejemplo en natación.
Como digo anteriormente comenzó en el Liceo pasando más tarde al equipo de ‘Rodrigo’, el Deportivo Juvenil de Tercera División, cuadro en el que sobresalían jugadores como Calvete, Carrillo, Belchite, Palletas, Díez, Longueira, Maristany, Nano Rábade y otros.
Cuando todavía era un chaval fichó por el Deportivo. Otero tenía unas grandes condiciones, una agilidad increíble, era valiente y todo ello le ayudaba a dar una gran seguridad al resto del equipo.
Su mala suerte fue el haber coincidido con el más grande de toso, Juan Acuña, sin embargo eso no quita para reconocer que fue uno de los mejores porteros que ha tenido nuestro equipo a través de su historia.
Una de las ovaciones más grandes que se han escuchado en el Estadio de Riazor se produjo cuando Otero detuvo un balón que había empalmado el sevillista Arza y que el coruñés paró con gran estilo.
Otra actuación memorable del coruñés fue cuando se le ganó al Real Madrid por 1-2 en el Estadio Santiago Bernabéu con goles de Pahíño por el Deportivo y de Di´Stéfano por el Real Madrid.
El Deportivo estuvo acorralado puesto que tuvo que jugar mucho tiempo con diez jugadores por lesión del defensa Irusquieta, pero en ese momento apareció el gran Otero, que lo paró todo menos un cabezazo de Di Stéfano.
El equipo coruñés fue muy aplaudido por el público madrileño y en especial su guardameta Otero.
Más tarde Juan Ignacio Otero ficharía por el Betis en la temporada 58/59 coincidiendo en el club andaluz con Eusebio Ríos, que sería entrenador del Deportivo en la década de los 80. También llegó a jugar en el Granada.
Abandonó el fútbol a los 37 años. Hace unos días me enteré de que sufrió una grave lesión en una pierna y desde aquí le deseo que se recupere lo más pronto posible.