La plantilla blanquiazul lleva casi dos semanas de entrenamiento en las que está ganando fondo físico.
A través de un circuito de fuerza, diseñado por Fran Molano, los futbolistas tienen que vencer diferentes estaciones con ejercicios de core, pesas, levantamiento de balones medicionales, barras etc...
Un trabajo exigente para ir ganando fuerza, después de una temporada atípica, con un parón por la pandemia del coronavirus de más de dos meses, un regreso a la competición y un nuevo receso, tras la suspensión del duelo ante el Fuenlabrada. Además del circuito, los jugadores combinan estos ejercicios con fondos de 1.000 metros para ganar resistencia aeróbica.
No se pierde de vista el fútbol y la otra parte de la sesión consiste en ejercicios técnico-tácticos, bajo la tutela de Fernando Vázquez.
Estos consisten en rondos de pase, fútbol en espacio reducido y tareas de posesión. El de Castrofeito y su cuerpo técnico son conscientes de que queda aún más de un mes por delante antes del inicio del curso y van poco a poco sumando intensidad con vistas a llegar en la mejor forma física al comienzo de la competición.