El liderato de la Liga ACB, por el que pelean Real Madrid y Barcelona, tres puestos para las eliminatorias por el título y la última plaza de descenso a la LEB Oro se ponen en juego este domingo en la última jornada de la primera fase.
Al Real Madrid le basta con un triunfo en San Sebastián para garantizarse acabar primero, lo que permite tener a favor el factor cancha hasta una hipotética final, un privilegio que también lograrían los de Pablo Laso si pierden y también lo hace el Barcelona en su visita al Obradoiro.
Los rivales de los dos primeros clasificados serán precisamente los dos equipos que lucharán por la permanencia. El Gipuzkoa es quien peor lo tiene ya que, aparte de ganar al Real Madrid, necesita que pierda el Obradoiro y que el Estudiantes logre el triunfo en su visita al Joventut.
Los guipuzcoanos, que han ocupado posiciones de descenso en 29 de las 33 jornadas
anteriores, son los principales candidatos a acompañar al Breogan a la LEB Oro, mientras que el Obradoiro depende de sí mismo y solo bajaría si pierde y ganan Delteco GBC y Estudiantes.
“No vamos a estar pendientes de nada más que de nosotros, aunque seguro que nos irán contando cosas. Sólo tenemos que mirar nuestro partido y estar centrados a tope en ganar al Real Madrid ya que esta temporada otros equipos le ha ganado”, señaló Sergio Valdeolmillos, entrenador del Gipuzkoa, que recordó que su equipo “nunca baja los brazos y nunca deja de creer”.
El otro foco de atención de la jornada estará en la lucha por clasificarse para los playoff, con tres plazas en juego a las que optan cinco equipos: Joventut, CB Canarias, Manresa, Zaragoza y Andorra.
Los cuatro primeros dependen de ellos mismos y si ganan sus respectivos partidos lograrán su billete para las eliminatorias por el título, mientras que el Andorra necesita, además de ganar al Unicaja y que pierda el Joventut, que se den otros resultados para lograrlo.
Dos de ellos -Zaragoza y Manresa- se enfrentan entre sí. El que gane de los dos jugará el playoff, mientras que el que pierda tendrá que esperar a lo que hagan sus rivales para apurar sus opciones.
