El Silva mató ayer dos pájaros de un tiro. Consiguió ante el Ribadumia su primera victoria de la temporada en A Grela y salió de los puestos de descenso directo. Todo esto después de un partido que tuvo de todo: goles, alternativas y hasta un penalti detenido por el portero Damián.
El equipo de Javier Bardanca saltó al campo concentrado y no tardó en ponerse por delante en el marcador. El central brasileño Lucas Scalon anotó el 1-0 tras un falta y encarriló la victoria para los locales.
Pero no fue un camino de rosas para el Silva. En el primer acto vio como el árbitro señaló una pena máxima que detuvo Damián. El portero coruñés mantuvo a su equipo por delante en el electrónico pero no pudo hacer nada para evitar el empate del delantero Hugo Soto tras el paso por vestuarios.
A pesar del tanto conseguido, al Ribadumia no le duró casi nada la alegría. Tres minutos después del 1-1 se produjo el 2-1 por medio de Aarón Sánchez, que conectó un cabezazo al fondo de la portería defendida por Ángel Expósito.
Ya en la recta final consiguió sentenciar el enfrentamiento el Silva. Marcos Gómez, que había anotado un golazo en el anterior duelo en A Grela, volvió a ver puerta. Aunque esta vez la diana no fue de tan bella factura. El zurdo realizó un disparo que fue desviado por un defensa para desgracia del Ribadumia.
Con este resultado el Silva se coloca en la décimo quinta posición con quince puntos, tan solo uno más que el Polvorín, que marca la zona de descenso directo. l