El once de agosto de 2012 es una fecha histórica para el deporte coruñés. Ayer se cumplieron siete años del oro olímpico que consiguió Sofía Toro en Londres junto a Támara Echegoyen y Ángela Pumariega en la clase Elliott 6 metros Match Race. Y también ayer la regatista reconoció que “aún me sigue pareciendo increíble lo que conseguimos”.
Sofía comentó que “ya cuando empieza agosto empiezo a ver cosas en las redes sociales” y a recordar una competición en la que “aunque no éramos las favoritas, todo salió perfecto”. “En los primeros días disputamos el round robin (liguilla) y luego piensas que en cuartos ya te van a eliminar. Pero ganamos a Francia por 3-0, aunque el 3-0 podía haber sido para ellas”.
Este triunfo permitió al trío conocido como ‘Xiquitas Team’ acceder a la lucha pro las medallas. Y tras la victoria en semifinales contra Rusia llegó el gran día, aquel 11 de agosto dorado tras superar a Australia. “Hace poco estuve ordenando las fotos de aquellos días para pasarlas a otro ordenador... Y tengo que reconocer que se me cayó alguna lagrimilla”.
Sofía disputó en 2018 el Mundial de 470, y señala que le da pena no haber estado en el de este año. Sigue pendiente de la competición, y esperando que su hermano Jano viva también la experiencia de unos Juegos Olímpicos como entrenador de Láser el año que viene en Tokio. La campeona olímpica, centrada ahora en continuar con su formación académica, no olvida la gloria de aquel 11 de agosto.