Sudáfrica se impuso a Gales por 16-19 en la segunda semifinal de la Copa del Mundo de Japón en un emocionante e igualado intercambio de golpes que se dirimió en el tramo final, y se jugará el título contra Inglaterra.
El partido arrancó con pugnas en el cuerpo a cuerpo, balones al aire en terreno de nadie y unos galeses que parecían más capaces de encontrar espacios, aunque fue Sudáfrica la que se adelantó en el marcador con una patada de Handre Pollard (0-3, m.15).
Los Dragones movían el oval con criterio y rapidez y se asomaban a la línea de ensayo. Una de esas jugadas derivó en golpe de castigo que materializó por Dan Biggar (3-3, m.18). Solo dos minutos después, Pollard anotaba el 3-6. Los sudafricanos causaban problemas en el maul, y en uno de ellos el árbitro decretó golpe de castigo que Pollard pasó para poner tierra de por medio en el 34, pero Biggar, al borde del descanso, apretaba de nuevo el marcador (6-9).
El medio melé galés hizo el 9-9 a los cinco minutos de la reanudación. Los Springboks recurrían a su potencia en el maul para ganar metros, y a la salida de uno de ellos Damián de Allende ensayó tras zafarse de tres zagueros. Pollard no falló con el pie (9-16, m.57).
Los galeses devolvieron el golpe tras una larga ofensiva repelida en más de 20 fases por un muro, hasta que Josh Adams halló un resquicio hacia la línea de marca a la salida de una melé. Leigh Halfpenny completó la jugada (14-16, m.65). A cinco minutos del final, Pollard logró transformar otro golpe (16-19) por una infracción en un maul . Y el marcador ya no se movería.
Tras acabar con el sueño de Gales de llegar a la primera final de su historia –que hubiera sido la primera entre selecciones del hemisferio norte–, los Springboks pelearán contra Inglaterra por lograr su tercera copa Webb Ellis, que se sumaría a las de1995 y 2007.