Jessica Vall centrará, en ausencia de Mireia Belmonte, las opciones de medalla del equipo español en los Mundiales de piscina corta que comienzan hoy en Hangzhou (China). España intentará superar los resultados obtenidos en la anterior edición, que cerró con dos plazas de finalista.
La delegación viaja a China con un equipo integrado por seis mujeres y tres hombres, más del doble de los representantes que participaron hace dos años en Windsor (Canadá), en los que contó con cuatro, dos hombres y dos mujeres.
Vall buscará subirse de nuevo al podio en una gran competición internacional, tras colgarse el oro en la prueba de los 200 braza en los Europeos de piscina corta disputados en Copenhague en 2017 y la plata en los Europeos de larga celebrados el pasado mes de agosto en Glasgow.
La barcelonesa es una de las máximas favoritas para colgarse el oro en unos 200 braza que parecen más abiertos que nunca en ausencia de la rusa Yuliya Efimova, la gran dominadora del curso en esta prueba.
Shiwen Ye, rival a batir
Vall parte con la quinta mejor marca de todas las participantes, tras firmar este año un tiempo de 2:20.06 en piscina corta. La china Shiwen Ye, que tras deslumbrar con 16 años en los Juegos Olímpicos de Londres, en los que logró el oro en los 200 y 400 estilos, este último con récord del mundo incluido, parece renacida para la gran competición como una excepcional bracista y este año ostenta el mejor crono en el doble hectómetro con 2:18.39. No será la única rival de la española, en el que las rusas Marina Temnikova (2:18.85) y Vitalina Simonova (2:19.43), así como la japonesa Miho Takahasi (2:19.25), aspiran a lo más alto del podio.
Más complicadas parecen las opciones de medalla para Vall en las otras tres pruebas en las que competirá en Hangzhou, los 50 y 100 braza, y los 100 estilos.
Medallas a las que también parece en disposición de aspirar Catalina Corró, que partirá con la segunda mejor marca de todas las participantes en la prueba de los 400 estilos, tras firmar un crono de 4:28.26 en los Nacionales de piscina corta disputados el pasado noviembre en Barcelona.
Vía libre para Hosszu
Esa marca sitúa a la nadadora española tan sólo por detrás de la gran favorita, la húngara Katinka Hosszu, que sin la presencia de Mireia Belmonte, que renunció a competir en los Mundiales tras sufrir una lesión de tobillo que la obligó a interrumpir su preparación, parece tener el camino libre para revalidar el título que ya logró hace dos años en Windsor.
Más difíciles se perfilan las opciones de podio para Joan Lluis Pons, Hugo González y Marc Sánchez, que tendrán como primer objetivo lograr un puesto en las finales.
Un reto que en los 400 estilos parece al alcance de Pons, que el pasado verano se colgó el bronce en esta prueba en los Europeos de piscina larga en Glasgow, como de Sánchez. Finalmente, González debuta en unos Mundiales de piscina corta con cinco pruebas: 50, 100 y 200 espalda, 100 mariposa y 200 estilos.