Márquez, que tiene 77 puntos de ventaja respecto al italiano Andrea Dovizioso (Ducati), que como él sólo ha ganado en una ocasión en Japón y fue el año pasado en un mano a mano, precisamente, con el vigente campeón.
A Marc le basta con acabar por delante de ‘Dovi’ para sellar su quinto título de MotoGP o, en caso de que el italiano acabe por delante, que no sume más de dos puntos, una cábala esta casi imposible.
Las estadísticas son favorables al ilerdense, quien desde 2013, cuando pasó a MotoGP como campeón del mundo de Moto2, tan sólo en 2015 se quedó fuera del podio de Motegi (cuarto), pues ganó en 2016, y fue segundo en 2017, 2014 y 2013, mientras que Dovizioso cuenta con la victoria en 2018 y dos segundos (2017, tras Márquez, y 2010).
Cuerpo a cuerpo
Al cuerpo a cuerpo entre los candidatos se pueden unir las Yamaha de Maverick Viñales y Valentino Rossi, y Jorge Lorenzo (Ducati), si ha logrado recuperarse tanto de la fractura que se produjo en Aragón como de las lesiones de Tailandia, donde se cayó en la primera jornada de entrenamientos.
En cualquier caso, a estos protagonistas habrá que unir otro que no siempre es bien recibido, el clima, en forma de lluvia, que suele ser habitual y que podría convertir el desarrollo de la carrera en una lotería.
El italiano Francesco Bagnaia (Kalex) y Jorge Martín (Honda), líderes de Moto2 y Mot3, respectivamente, cuentan con una nueva oportunidad de seguir haciendo camino hacia sus primeros títulos mundiales.
Con 28 y 26 puntos de ventaja cada uno, tanto Bagnaia como Martín se van acercando poco a poco a su objetivo, si bien el rendimiento de uno y otro difiere sensiblemente en esta parte final de una temporada mucho más apretada de lo que cabía esperar en ambas categorías.
Bagnaia no se ha bajado del podio desde su discreta actuación en Alemania (11º), con tres victorias, un segundo y un tercero. Su rival por la corona, el portugués Miguel Oliveira, no ha mostrado la misma regularidad, si bien en 2017 ganó los tres últimos GP (Australia, Malasia y Valencia).
Martín tiene un rival mucho más correoso en el italiano Marco Bezzecchi (KTM) y si bien las circunstancias se aliaron con él en Tailandia al caer en la última curva del trazado por culpa de su compatriota Enea Bastianini (Honda), lo cierto es que el madrileño no se puede despistar en lo más mínimo si quiere asegurar cuanto antes el título.
