Borja Jiménez asegura que no ser campeón de la Primera RFEF no sería un fracaso y sí el no conseguir el ascenso a la Segunda División al término de la presente temporada 2021-2022.
El entrenador abulense hace muy bien en recordar al deportivismo cuál es el objetivo que el club se ha marcado para este curso, que no es otro que regresar al fútbol profesional tras dos campañas militando en la categoría de bronce.
Quién hubiese pensado que esto sería un coser y cantar no tiene buena memoria o no quiere recordar lo padecido la campaña anterior, en la que hasta estuvo en juego el seguir en la antigua Segunda División B tras una trayectoria irregular que provocó mucho nerviosismo entre los aficionados y el Consejo Administración.
Puedo entender las dudas de algunos al ver el actual fútbol del Deportivo que le ha llevado a la segunda plaza de la clasificación a seis puntos del Santander y con el golaveraje perdido a falta de nueve partidos por disputar (más el del Extremadura ya ganado por dos a cero). Pese a ello, las opciones de ascender continúan intactas.