El balonmano nunca ha sido un deporte puntero en A Coruña. Tiene más tirón en el sur de Galicia. Y con Dépor, Leyma Coruña y Liceo, es difícil hacerse un hueco. Pero el OAR quiere seguir creciendo. No se conforma con estar en la categoría de bronce nacional.
En las últimas temporadas, el club herculino ha quedado cerca del ascenso. Y, según pasan los años, parece que la ilusión crece. Así se ve con los fichajes que está haciendo el OAR, que tienen buena pinta.
También va creciendo el número de aficionados. San Francisco Javier empieza a quedarse pequeño.
Con estos mimbres, es normal que el club no ceda en su objetivo de ascender. Otros equipos de la ciudad son una buena fuente de inspiración. Y, si ellos lo han conseguido, ¿por qué no el OAR?
