Convendrán conmigo en que el entorno es importante. A veces no decisivo, pero sí condicionante. No es lo mismo convivir en armonía con lo que te rodea que estar en permanente crispación. Hay que saber manejar y cuidar al entorno para que, lejos de restar, sume... Decíamos ayer.
 

En estos momentos de dudas, las certezas son las que ponen orden. Es cierto que, cuando las cosas salen mal como en este final de temporada, siempre hay más preguntas que respuestas, pero entiendo que todas serán respondidas en su momento.
 

Todos estamos igual, desde el propio club, a la afición, incluso los futbolistas del primer equipo. Esperando a que se acierte, aguardando a que el entorno sea propicio a todos los niveles.
 

Además de atinar con un entrenador que sea adecuado para el Deportivo, desde la entidad también podrían dar un paso adelante, reunirse con la afición e intentar apaciguar los ánimos de todos los que tienen dudas y temor. Todos somos ese entorno que ha de ser favorable para los intereses de lo que más importa. El Depor.