EL DEPOR ME HA DADO MUCHO, COMO A TODOS. Gracias a este club he podido conocer a personas como Alfredo Santaelena. Desde el primer día que llegó a la entidad en 1994 me ganó por su forma de ser, que no ha cambiado ni un ápice con el paso del tiempo. Más bien lo contrario. Alfredo es más Alfredo que nunca, y eso es mucho decir.
Hay seres excepcionales. Desde que los conoces sabes que todo va a estar bien, que todo va a discurrir por los mejores senderos. No voy a ocultar el enorme cariño que le tengo, ni que me gustaría que algún día entrenase al RC Deportivo. De hecho, hace un par de temporadas, pensé que el club le daría la oportunidad de sentarse en el banquillo. Es evidente que mañana, como todos los deportivistas, quiero que el Depor gane por goleada, es un deseo lógico; a partir de ahí espero lo mejor para el Señor Santaelena, porque se lo merece.
Gracias a tipos como Alfredo el mundo del fútbol es menos hipócrita y tiene más palabra. Es menos teatral y más auténtico. En definitiva, es mejor.