El Coruxo es, junto al líder Guijuelo, el único equipo del grupo 1 de Segunda Federación que no ha encajado un solo gol en las tres primeras jornadas de liga. Jacobo Montes, que se hizo cargo del conjunto de O Vao en diciembre de 2021, hace análisis del inicio de competición y del encuentro de la jornada 4, el sábado, a domicilio, ante el Valladolid Promesas.
No está convenciendo a nivel de juego, peo su entrenador es cauto. “No hay que perder la perspectiva. No hemos cumplido ni un mes de competición y yo soy de los que piensa que los procesos tardan tiempo en asentarse. Es cierto que nos está costando más de lo que nosotros creíamos que nos iba a costar, pero yo creo en que el equipo vaya mejor día a día. Tenemos la base, que es la solvencia defensiva, pero nos falta la otra parte, la fase ofensiva, en la que estamos haciendo mucho hincapié en movilidades, automatismos... Pero lleva tiempo, no es cuestión de que salga un día para otro. Queremos ser más difíciles de contrarrestar para el rival”, apunta Jacobo.
Lectura positiva
Jacobo se queda con lo positivo. “Todos los equipos responden a estímulos y nosotros estamos en ese núcleo. No hay que perder el norte. Las sensaciones del equipo a nivel ofensivo no son buenas, pero van cinco puntos en tres jornadas, no hemos perdido, no hemos recibido gol... Y todo esto sin estar bien. Eso quiere decir que el equipo tiene un carácter competitivo que no hace falta estimular para que responda”, añade el míster del Coruxo.
Sobre el próximo rival, el Valladolid B, el técnico del Coruxo comenta que “se prevé un grupo súper igualado, casi o más que el de la temporada. Nos enfrentamos a un gran rival y difícil de contrarrestar porque aglutina mucho nivel individual en muchos jugadores del medio del campo hacia delante con unas buenas movilidades en origen. Es un equipo intenso y con un buen tono físico. Pero tendrá sus defectos, como todos, y esperamos dar una buena versión que nos permita sumar algo positivo”.
A nivel de autocrítica, Jacobo Montes destaca que “siempre podemos dar más, incluso a nivel defensivo a pesar de no haber recibido ningún gol. Contra el Palencia Cristo el rival tuvo tres o cuatro ocasiones claras: dos de saques de banda mal defendidos, una de un córner mal defendido... Siempre se puede mejorar. Hay jugadores que aún no están en su mejor nivel y eso hace el ritmo ofensivo no sea el óptimo. Hasta ahí, debemos seguir compitiendo como lo estamos haciendo. El que crea que se construya un equipo en un mes está muy equivocado. Son muchas cosas que hay que controlar”, concluye el entrenador del Coruxo.
