El Fabril sigue invicto después de tres jornadas: una victoria en casa y dos empates como visitante. Contra el Silva, en el complicado campo de A Grela, tuvo la ventaja de jugar media hora en superioridad numérica por la expulsión de Callón pero no fue capaz de aprovechar la superioridad numérica. Se echó en falta alguna solución por parte de Valerón en el tramo final.
El partido se puso muy de cara para el Fabril nada más empezar. Un tiro de Sarmiento, un jugador diferente, asociativo, que destacó en la primera parte, provocó el error de Adri Ríos, que le dio el 0-1 en bandeja a Iván Guerrero, lateral derecho del filial que presionó al portero del Silva en el área.
A partir del minuto 20, el Fabril perdió el control, el dominio que tenía en el partido. Dejó de circular la pelota en campo contrario y solo los jugadores de línea defensiva y la pareja de mediocentros intervenían en pases horizontales en campo propio sin hacer ningún tipo de daño al Silva, que conseguía destruir el juego del filial herculino cada vez que daba un pase hacia delante.
En el tramo inicial de la segunda mitad, el Fabril encajó el primer gol de la temporada. Penalti dudoso de Manu Mosquera sobre Callón que el propio exfutbolista del filial del Depor se encargó de transformar en gol desde los once metros.
Contra diez
Poco después se produjo otra situación clave en el desarrollo del encuentro: segunda tarjeta amarilla al propio Callón. El Fabril jugó media hora en superioridad numérica y no la aprovechó. Como era de esperar, el Silva dio un paso atrás y juntó dos líneas de cuatro en campo propio.
El Fabril no se salió del 1-4-2-3-1 con el que empezó la temporada y el trabajo defensivo del Silva fue superior al ofensivo del equipo de un Valerón que no probó a jugar con dos puntas para exigir más a la pareja de centrales locales ni a quedarse con tres defensas teniendo en cuenta que el equipo local solo tenía a Ernesto en punta.
La única innovación del entrenador del Deportivo B en los últimos minutos fue situar al mediocentro Diego Villares en el lateral derecho y casi le sale bien al técnico canario porque el ’10’ blanquiazul estuvo a punto de marcar un gol llegando por fuera a un centro desde la izquierda, pero Ríos hizo un paradón y desvió la bola a saque de esquina.
Una de las noticias negativas del derbi contra el Silva fue la lesión del extremo canario Rayco, que tuvo que abandonar el terreno de juego entre lágrimas en el tramo inicial de la segunda mitad dejando su lugar a Juan Cambón.
Después de tres jornadas de liga solo tres futbolistas de la plantilla han disputado todos los minutos y uno de ellos, el central zurdo Juan Rodríguez, todavía es juvenil. Los otros dos jugadores que han jugado 270 minutos son el lateral izquierdo Álex Boedo y el mediocentro Diego Villares.
