El presidente y máximo accionista del Celta de Vigo, Carlos Mouriño, dijo ayer, tras visitar las obras de la nueva ciudad deportiva que el club está construyendo en Mos, estar “convencido” de que el proyecto, incluido el área comercial, será una realidad pese a la oposición de los comuneros de Tameiga.
“En estos momentos las negociaciones no existen pero seguimos diciéndoles que creemos que la propuesta que hacemos es buena y que terminaremos llegando a un acuerdo con la otra parte, estamos convencidos”, comentó Mouriño a los periodistas.
Cambio de postura
El pasado 6 de noviembre, tras la junta de accionistas, Mouriño dejó entrever que la ciudad deportiva únicamente se construiría si se cerraba el acuerdo con los comuneros de Tameiga, donde está previsto levantar un centro comercial.
“Siempre hemos hablado de un proyecto único y es lo que vamos a hacer. Tiene que salir adelante y va a salir adelante”, comentó al ser preguntado por aquellas declaraciones. Mouriño destacó que los trabajos de la primera fase de la ciudad deportiva van “por buen camino”, y, aunque no quiso marcarse plazo alguno, confía en que en el mes de septiembre los campos de los equipos profesionales ya sean una realidad.
“Tenemos que seguir trabajando con los máximos medios posibles. En estos momentos los jugadores de la cantera son muy importantes y necesitamos tener más en el primer equipo, y para eso es fundamental tener unas buenas instalaciones y estas serán de un primerísimo nivel”, insistió. El arquitecto de las obras, Jesús Irisarri, indicó que todo marcha según lo previsto.
