La selección española sub-21 perdió este jueves por 0-2 ante Eslovaquia en el partido amistoso disputado en el estadio Chapín de Jerez de la Frontera, previo al choque de clasificación para la Eurocopa 2025 de la categoría que disputará el próximo martes en Almería ante Bélgica.

El seleccionador español, Santi Denia, sacó dos onces completamente diferentes en cada periodo y en cada uno encajó un gol de un rival que se mostró siempre bien posicionado y que complicó mucho las acciones de la Rojita.

En la primera parte, el fútbol fue pausado y de escasa vivacidad durante gran parte, aunque algunos destellos de España llevaron la emoción a las gradas. En el minuto 9, un centro de Hugo Novoa desde la derecha lo cabeceó Samu Omorodion, libre de marca, y el balón salió rozando el larguero.

Diez minutos más tarde, un error defensivo de Eslovaquia por poco le cuesta un autogol, pero el portero Lubomir Belko reaccionó bien, mientras que en el último cuarto de hora se animó el partido y una avanzadilla en conducción de Timotej Jambor fue convertida en el primer gol, al cruzar el eslovaco el balón lejos del alcance de Alejandro Iturbe (m.33), en una jugada que partió de un error local por entrega al contrario.

Desde entonces, España empujó hacia la meta rival en un asedio sin pausa para buscar el empate, que pudo llegar en un chut de Fermín López que despejó Belko (m.35). Lo intentó también Fran Pérez en el interior del área entrando por la derecha, pero su disparo se estrelló en un poste (m.39), y un minuto más tarde llegó la réplica visitante, aunque Iturbe rechazó con eficacia un tiro del dinámico Nino Marcelli.

Tras la reanudación, Santi Denia cambió todo el equipo, con once incorporaciones, y una de ellas, Alberto Moleiro, tuvo la primera ocasión, que no encontró premio (m.53), pero el conjunto español siguió con su idea de arremeter contra el área de su adversario sin otro objetivo que asaltar cuanto antes el gol.

En uno de esos intentos, el meta Belko se lució con una palomita para detener un cabezazo bombeado de Moleiro que buscaba entrar junto a la raíz del poste izquierdo de la meta eslovaca (m.68), pero lo que iba a llegar era el segundo tanto de los visitantes, en una internada por la derecha que Adrian Kapralik no perdonó (m.74).

Desde ahí al final, escaso juego en el pasar de los minutos, con una España que debe mejorar si quiere ganar el martes a Bélgica el partido de fase de clasificación para la próxima Eurocopa.