El entrenador del Albacete, Luis Miguel Ramis, reconoció ayer en rueda de prensa que “hay un acercamiento” con la junta directiva para la renovación del contrato como técnico del conjunto albaceteño, que expira el próximo 30 de junio.
Así se pronunció el preparador del conjunto manchego a las preguntas de los periodistas y admitió que su futuro no es una cuestión que le “preocupe” en estos momentos.
“Venimos hablando desde hace tiempo de temas de fútbol cuando nos juntamos en algunas comidas, pero no es algo que me preocupe ahora mismo” apuntó.
El estratega tarraconense, que compareció ante los medios de comunicación un par de días antes de que su plantel se enfrente al Deportivo, cuarto clasificado y, a priori, uno de los grandes favoritos al ascenso a Primera, afirmó que el cuadro gallego está “preparado para todo” y que “ todo lo que no sea ir primero es un problema”.
Del bloque deportivista destacó que “tiene un buen posicionamiento, buen juego interior, aunque con progresiones de laterales o jugadores de banda cuando lo necesita”.
Ramis, que conquistó la Liga como jugador blanquiazul, admitió que recuerda aquella etapa con “buenos momentos en los que”, dijo, “nos emocionamos y contagiamos del espíritu de una ciudad ilusionada”.
Admitió que Riazor “es un gran campo en el que el público aprieta mucho” y precisó que “el Depor esta temporada, al igual que nosotros, nosotros, no ha perdido en su terreno y eso dice mucho del potencial que tiene como local”.
Preguntado por su opinión acerca del primer fichaje de invierno del club castellano-manchego, Álvaro Peña, resaltó su calidad y polivalencia.
“Es un jugador con calidad que puede jugar en todas las posiciones del centro del campo y que nos va aportar también la frescura competitiva que necesita el grupo para no relajarse”, indicó.
