Julio Delgado Domínguez (Viveiro, 1996) es una voz autorizada en materia de derbis: disputó nueve, siete con la camiseta blanquiazul y otros dos con la celeste. El mediapunta llegó a Abegondo en su primer año Cadete y se marchó en el segundo Juvenil tras un encontronazo con la anterior directiva por su renovación y acabó en el eterno rival. Julio es ahora futbolista del Castellón, que milita en el grupo 3 de Segunda División B.
Nueve derbis, siete con el Deportivo y un con el Celta, entre cadetes y juveniles, ¿cuáles son tus mejores recuerdos?
Guardo muy buenos momentos de los derbis, pero mi último gran recuerdo es con la camiseta del Celta. Fue en A Madroa y era un partido importante para los dos en la lucha por el campeonato. Teníamos que ganar y lo conseguimos con dos goles míos. Fue muy especial.
¿Y alguna vivencia en los derbis de tu etapa con el Depor?
Recuerdo un partido con el Cadete A, aunque ya formaba parte del Juvenil B, en el que nos jugábamos la liga en la última jornada. El campo 1 de Abegondo estaba lleno de gente, había gente de los Riazor Blues y fueron sensaciones muy bonitas. Ganamos y lo celebramos sobre el césped. Fue una auténtica fiesta. También fue especial el primero, yo era un niño de 14 años y ya formaba parte del Cadete A. Jugábamos en casa y nos adelantamos en el marcador, pero al final nos empataron. Fue una lástima.
Recuerdo el cosquilleo en los momentos previos a un derbi gallego
¿Qué sensaciones se viven antes de un derbi y en el momento de salir al campo?
En mi caso siempre lo viví con muy buenas sensaciones, de partido especial y con un cosquilleo en la barriga en los momentos previos. Aunque solo son tres puntos como los de cualquier otro partido, es un derbi gallego y es una semana diferente, digan lo que digan. Los nervios que podía tener antes del partido se me pasaban una vez empezando porque me concentraba en jugar.
No recuerdo una diferencia tan amplia en División de Honor Juvenil
El Celta aventaja en 21 puntos al Depor esta temporada en División de Honor Juvenil, ¿crees que hay tanta diferencia?
No recuerdo una diferencia tan amplia en División de Honor Juvenil ni en otras categorías. Cada temporada es un mundo y esta se ha dado así, pero no quiere decir que esa sea la diferencia entre las dos canteras. Creo que el nivel de las dos es muy parejo y así lo he palpado durante los años que he vivido.
¿Quién es para ti el favorito en un Deportivo-Celta?
Ya sea en A Madroa o en Abegondo e, independientemente, de la diferencia de puntos, en un derbi no hay favoritos. Siempre han sido partidos muy igualados e intensos y con muy buenos jugadores en los dos equipos. Son duelos que se deciden por pequeños detalles o por destellos. Tanto la calidad técnica individual de los jugadores y el nivel táctico están muy igualados.
¿Qué diferencias de trabajo o metodología te encontraste en tu paso por las dos canteras?
En las dos estuve muy a gusto y contento por la manera de trabajar, que es muy buena en los dos clubes, en mi opinión. Celta y Deportivo tienen dos de las canteras más importantes de España, no solo de Galicia, y esa diferencia que pueda haber entre una y otra se da en pequeñas cosas.
Sucedieron una clase de circunstancias que me obligaron a dejar el Depor
¿Por qué dejaste el Depor en juveniles para fichar por el Celta?
Sucedieron una clase de circunstancias que me obligaron a tomar una decisión mejor para mí. Se dio ese cambio y nada más. Cuando miro para atrás solo pienso que pasé tres años maravillosos en A Coruña y otros tres, también maravillosos, en Vigo. Estoy muy contento de haber disfrutado de mi carrera en ambos clubes.
¿Mantienes buena relación con tus excompañeros?
De todos los equipos en los que he estado me he llevado buena gente y amigos. Es el caso de Bicho, con el que volví a coincidir más tarde en el Racing de Ferrol. Las últimas navidades nos encontramos en A Coruña y tuvimos una buena charla. Es de las cosas más bonitas del fútbol.
¿Por qué crees que llegan más jugadores de la cantera del Celta al primer equipo que en las categorías inferiores del Deportivo?
No sabría decirte el porqué, pero como ya he comentado en las dos canteras se hace un muy buen trabajo. En el caso del Depor no se apuesta por la gente que viene desde abajo. Al igual que sucede en el Celta, espero que consigan llegar más jugadores arriba. En Abegondo hay chicos de muy bien nivel y que trabajan en condiciones para llegar al primer equipo.
Dos años lejos de Galicia, ¿qué es lo que más echas de menos?
Lo que más echo de menos es a la familia, a mis padres, Julio y Eva, y a mi hermano Pablo, pero tengo la suerte de estar en contacto cada día.
¿Un sueño en el fútbol?
Todavía soy muy joven, tengo 23 años, y siempre me he movido por la ambición y he pensado en llegar más arriba. Por ahora estoy en un buen club, el Castellón, y en una buena categoría, la Segunda B.
Este club que no es propio de esta categoría y tiene un proyecto que va a más
Julio Delgado debutó en Segunda B con el Celta B en 2014 y ha pasado por varios clubes desde entonces, siempre en la categoría de bronce: Racing de Ferrol (2016/17), Atlético Baleares (2017/18) y Real Murcia (2018/19). En el último día del mercado invernal fichó por el Castellón.
¿Por qué has cambiado el Murcia por el Castellón en el mercado de invierno?
La situación que me encontré en Murcia no era la deseada. Es una pena porque un club como el Real Murcia, con la masa social que arrastra y el estadio que tiene, es una maravilla. Los problemas económicos y otra clase de cosas no nos permitían estar a gusto. El proyecto que me plantearon en Castellón y el interés que mostraron por mí me convencieron. El recibimiento espectacular, buen vestuario, estoy muy contento, se hacen las cosas bien, club para crecer.
¿Qué te convenció del proyecto?
Es un proyecto bonito y que va a más, con un equipo hecho para estar arriba y jugar el ‘playoff’ de ascenso a Segunda División. Por la gente trabaja en el club, las condiciones y su afición, este club que no es propio de esta categoría. Sería bonito crecer en el Castellón y lograr el ascenso juntos.
Último clasificado del grupo 3, esta temporada se ha complicado.
No han salido las cosas como se presuponía, pero intentaremos sacarlo adelante y salir de ahí para volver a soñar porque este es un club que va a más. Con la plantilla que tenemos y toda la gente que nos apoya, estoy seguro de que vamos a salir.
Acostumbrado a luchar por lo más alto con el Depor o el Celta, ¿habías vivido alguna situación parecida a esta en tu carrera?
En mi segunda temporada con el Atlético Baleares pasó algo parecido, pero nos acabamos salvando porque teníamos equipo para ello. Creo que esta no es una situación límite porque hay muchos partidos por delante todavía y la clasificación está muy ajustada.
¿Cómo es el ambiente en el estadio de Castalia?
La gente vive mucho el fútbol aquí. El fin de semana que debuté, nada más llegar contra el Espanyol en casa, me encontré un estadio con unos 10.000 espectadores. Jugar con tanto público que te apoya es una de esas cosas que te hacen sentir que eres un futbolista de verdad.
Atlético Baleares, Murcia y, ahora, Castellón, ¿te has acostumbrado al Mediterráneo?
El clima es ideal, me da vidilla y se pueden hacer muchos planes. Me encuentro muy a gusto aquí, pero como no hay nada como a miña terra.
